Capítulo uno.
Después de estacionar mi coche, reviso por el espejo retrovisor si mi maquillaje y cabello están en perfecta condición; gracias a Dios están en perfecto estado.
Bajo de mi coche y acomodo mi ropa, hoy me quise vestir con algo casual pero elegante y sexy, unos leggins de cuero apretados en mi cintura pero al final son olgados y un top negro, una chaqueta olgada negra Louis Vuitton junto con una cadena de oro y unos anillos y mis tenis blancos.
Comienzo a caminar, camino con seguridad y elegancia. Varios estudiantes me ven y empiezan a murmurar, ya estoy acostumbrada, así que los ignoro.
Me encuentro con Kate por el camino hacia la entrada de la universidad.
—Hola Layla.
—Hola. —Le dedico mi mejor sonrisa —¿Me extrañaste?
—Pues... ¿Si? —Se ríe y yo le doy un codazo, y me río por lo bajo.
—Obvio que tenias que extrañar a la persona que viste hace dos días en una cafetería. —Me río y ella hace lo mismo. —¿Vamos? —Ella asiente y me toma por el brazo.
Comienza a contarme una anécdota que le sucedió hace un día y me río abiertamente ante sus estupideces.
Después de eso trata de convencerme para que la acompañe a no se que lugar, por que no le puse mucha atención a lo que dijo, estoy envuelta en mis pensamientos.
Kate no deja de mover mi brazo, y siempre lo hace cuando quiere que acepte algo y en esta ocasión también.
—Anda vamos... ¿si? —Hace un puchero que me da risa y niego con la cabeza divertida por lo que está sucediendo. —Por favor Layla.
—Emh, no lo se, déjame pensarlo. —Ella me mira con cara de fastidio ante mi contestación.
—Okey, ya no te voy a presionar, pero piensa que podemos comprar lo que sea, en serio necesito ir a comprar ese bolso, además es una edición limitada.
—Kate si tienes miles de bolsos ¿enserió quieres más?
—Si, no importa cuantos tenga, seguiré comprando más.
—Está bien, solo que después pasaremos a Victoria Secret's
—¡Si! después pasamos a donde tu quieras, es que enserió necesitaba ir con alguien. —Aplaude contenta y sigue hablando. —Emilia ni siquiera contesta su teléfono y pues tú eres tú.
—¿Yo soy yo? —La miro ofendida.
—Pues si tú eres tú, hay días que ni siquiera sé si estás de mal humor o estás contenta, no se como Mateo te a soportado todos estos años, aunque la verdad yo no se como te soportas tú misma. —Me dedica una sonrisa nerviosa y yo la fulmino con la vista.
—¿Que? sabes que es cierto Layla, ni siquiera te soportas tú misma.
—Kate si sigues no iré contigo, y no importa cuantos pucheros me hagas.
Ella me ve como si quisiera decir algo pero le dedico una mirada para que ya deje de fastidiar con sus comentarios y se guarda las palabras por que sabe que no iré con ella si sigue.
—Si te apuras a llegar a la puerta de la universidad sería mejor.
Es nuestro primer día despues de las vacaciones, y nuestro último año en la universidad, la verdad no me gusta nada esta universidad, las personas de aquí son tan hipócritas y petulantes. Solo los que vienen aquí son de familias ricas, con empresas etc. Mi padre me obligo a entrar en esta por que es legado familiar, todas las generaciones de nuestra familia han estado en esta Universidad.
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¿Quieres jugar con fuego?
Teen FictionLayla Pert siempre iba con la cabeza en alto y elegancia, no le importaba qué hablaran de ella, ya qué ella sabía que era perfecta y también sabía que al pasar por algun lugar la iban a voltear a ver. James Kiden siempre fue el chico al cual no le p...