Un hermoso día de verano, el calor ya se sentía, las risas y la alegría de esta época tan esperada por muchos se notaba en el aire, la ropa seductora y veraniega ya aparecía en los escaparates. Los adolescentes se veian entusiasmados por las vacaciones que ya se acercaban, con sus trajes cortos y reveladores, todos menos un estudiante.
Abigail Roberts, ella siempre con el mismo atuendo, una sudadera larga, una mascarilla negra, unos pantalones que que le cubrían hasta los talones, la capucha siempre sobre su cabeza, su pelo hecho un desastre y unos tenis mal amarrados. Como todos los días, Abigail intenta entrar a la escuela sin llamar la atención pero con esa ropa, destaca demasiado entre la multitud. Al intentar entrar por las puertas principales todas las miradas caían en ella, parecía que el mundo entero había decidido callarse para solo mirarla, lo único que se escuchaba era los mormullos de la gente y el cantar de las aves. En un punto del incomodo silencio, alguien saco su celular y accidentalmente activo el flash, se noto en lo poco que se lograba ver de su rostro lo alterada que estaba, tanto que se hecho a correr lo mas rápido que pudo, apenas logrando mantenerse de pie al momento de pisarse los cordones.
Al momento de iniciar la clase todos estaban parloteando, riéndose, contando las tendencias de esos días, y Abigail en una esquina como si fuera una simple sombra sin importancia. En eso la profesora, la Sra. Anderson llego a silenciar a los muchachos.
-Okey, buenos días estudiantes, quiero que antes de que iniciemos la clase me dejen sus informes que les deje el fin de semana de tarea en mi escritorio. Quien no lo tenga serán dos puntos menos en la calificación del mes.
Mientras la Sra. Anderson limpiaba el pizarron un incomodo silencio cubría el salón, los jóvenes algo alterados miraban a los demás buscando ayuda. Todos habían olvidado el informe.
-¿Que pasa chicos, porque ninguno se levanta? No me digan que olvidaron la tarea.
La profesora claramente fastidiada de su trabajo, dijo en voz alta intentando mantener la calma.
-Okey, esta bien, esta TODO bien. Todos llevan tarea extra toda la semana y me la devén entregar sin falta todos los días en mi escritorio antes de que yo llegue.
Los quejidos de los alumno no se hicieron esperar, hasta que algo interrumpe a todos. Un chico desaliñado, claramente recién levantado, llamado Dylan. El abrió la puerta de golpe algo asustado y cansado.
-PERDÓNEME PROFESORA PUEDO PASAR ES QUE NO ME DI CUENTA DE LA HORA Y-
-Otra vez tarden Dylan, [tch] esta bien puedes pasar, ¡pero que sea la ultima vez que llegues tarde!
-Si miss Anderson, claro sera la ultima vez.
-Eso espero, [se aclara la garganta] bueno como iba diciendo todos los presente llevaran tarea extra ademas de-..... ¿Dylan que es eso?
-Oh es el informe que nos pidió la semana pasada lamento si esta un poco sucio es que se me callo algo de cafe encima de el, PERO ESTA TODO LO QUE NOS PIDIÓ.
La maestra un poco sorprendida ante lo que Dylan acababa de decir se quedo sin palabra solo suspiro y le dijo que se sentara.
-Okey todos menos Dylan llevan tarea extra. Ya que aclaramos eso empezaremos la clase.
Al terminar la clase todos se empezaron a dirigir al gimnasio, la maestra Anderson solo se quedo a revisar algunos papeles cuando se fijo algo extraño en su escritorio. Era el informe de alguien más. Al levantar el papel y revisar el nombre la maestra quedó algo confundida.
-Abigail Roberts... Mmnn que curioso.
La maestra quedó pensativa al ver el informe bien elaborado, con excelente ortografía y una limpieza impecable. Apenas se dio cuenta que la siguiente clase había entrado.
Mientras tanto Abigail estaba esforzándose para no caer del agotamiento mientras corrían de un lado al otro en la clase que más odiaba, Educación Física.
-UFF UUFF UF UFF [se escuchaban los gemidos de la pobre que atravesaban capas y capas de ropa]
-VENGA CHICOS UNA VUELTA MÁS!! [gritaba el entrenador sentado como si eso fuera lo más fácil del mundo]
Todos se quejaban por lo exhaustos que estaban, hasta que el profesor sacó unos balones para que jugarán algo de fútbol como si no existiera otro tipo de juego.
-LOS QUE QUIERAN JUGAR AQUÍ ESTA EL BALÓN TIENEN MEDIA HORA!!
La mayoría de los muchachos estaban dándolo todo como si fuera una final en la copa mundial, las chicas se les quedaban viendo como sus cuerpos marcados por el sudor corrían de un lado al otro.
Uno de los chicos que estaba en el campo era Dylan, se divertía con los demás cuando de la nada se dio cuenta que Abigail estaba en una esquina de las gradas solo en la sombra, cada tanto mirando a todos lados con la mirada perdida como si estuviera buscando algo o alguien. Cuando de la nada...
-DYLAN CUIDADO!!
La pelota golpeo justo en la cara de Dylan dejándole un gran morete en el rostro junto un raspón que goteaba sangre.
-DYLAN, ESTAS BIEN?! [grito el entrenador]
-S-Si estoy bien [tambaleándose]
-Okey tiempo fuera!! [grito el entrenador] Dylan tenemos que llevarte a la enfermería
-E-estoy bien profesor solo fue un pequeño raspón [quejido]
-Mmnnn.... [el Sr. García miraba al rededor como si buscará algo hasta encontrase con los ojos de Abigail]
-Abigail! Puedes llevar a Dylan a la enfermería?
-Q-q-que? [tartamudeaba al no esperarse la pregunta del Sr. García]
-Lo que escuchaste, el está herido y yo debo seguir cuidando de estos pequeños pubertos, acompaña a Dylan a la enfermería.
-P-p-pero yo.. Este.. Yo... [suspiro] Esta bien [ella simplemente bajó las gradas desanimada de no haber podido decir que no]
-Ten cuidado, el es un buen jugador no queremos perderlo [dijo el entrenador en tono de broma]
-Si profesor [solo dijo eso agachando la cabeza mientras ayudaba a Dylan a caminar]
Mientras iban camino a la enfermería el silencio era tan denso que se podía cortar, ni siquiera se lograba escuchar nada de los salones de al lado como si no hubiera nada ni nadie mas en la escuela. Ambos sienten la incomodidad del otro pero no saben que decir, así que Abigail decide...
Aquí tenemos nuestra primera encuesta:
(Elijan con sabiduría lo que pase aquí podrá afectar en la historia)A)Preguntar si "esta bien" para romper el hielo
B) No decir nada y dejar las cosas como están
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Sonríe a la cámara
FantasiAbigail siempre a estado cubierta de ropa de pies a cabeza. Lo que la hace destacar de el resto, y aunque haga frió o calor siempre esta tapada. Es demasiado tímida y retraída y se niega a salir en foto al punto de espantarse y aterrorizarse al mome...