in love | shim jake.

Capitulo 17

─ Oye. ─ rechinó el australiano por detrás de la muchacha que por suerte la encontró en la cafetería de la escuela ─ faltaste a clases, ¿qué fue lo que te paso? fueron dos días o ¿tres? no estoy seguro.

Olivia observo como este castaño le dedicaba una mirada dulce y tan llena de emoción al verla, ¿de verdad la había extrañado a ella? Nada tenía sentido, ni siquiera entendía como es que tuvo tanta suerte de encontrarlo en esta vida, el era muy dulce y tan inocente.

Sin mas, decidió dirigir su mirada hacia el estante frente a ella y seleccionar algún bocadillo para desayunar. Si, había ignorado al castaño aunque muy en el fondo su corazón se rompía en mil pedazos.

Al terminar de elegir su desayuno comenzó su paso lejos del castaño, ni siquiera podía verlo a la cara y mucho menos a Sunghoon.

─ Sunghoon se pondrá feliz de verte. ─ confesó el australiano por detrás de ella, al parecer el plan de este era seguir a su amiga aunque para la muchacha no era nada apropiado.

Olivia detuvo su paso logrando que el castaño también imitará su acción, la mirada de la muchacha parecía neutra, triste y perdida.

─ Jake necesito estar sola. Hazle saber a Sunghoon también . . por favor.─ la peli roja se retiró sin mas que hacer a su lado dejando al muchacho confuso.

¿Qué había cambiado en ella estos tres días? A pesar de que fue muy confusa la repentina situación ella mantenía aun su linda personalidad educada.

Quien decidió aparecer esta vez fue el castaño menor, de tan solo ver al australiano triste su curiosidad y preocupación aumento en un segundo.

─ ¿Que te ocurre?─ pregunto ocupando la banca a su lado.

─ No es nada. Estoy preocupado por el evento, estamos a tan solo cuatro días de presentarnos, ¿crees que ella se presente?─ murmuro el australiano.

─ Lo hará. Recuerda que su tío dijo que se encontraba enferma y solo necesitaba descansar.─confeso el coreano dulcemente ─ estoy seguro que en ese descanso tuvo tiempo de planificar su presentación.

El timbre resono por todo el establecimiento, era hora de entrar a clases y para el australiano era demasiado duro verla allí; su amigo no estaba enterado de nada.

Ambos castaños ocuparon las bancas del fondo como de costumbre, la banca de la muchacha aun se mantenía a su lado pero una vez mas, no fue ocupada. Olivia decidió sentarse en las primeras bancas donde estaría alejada de toda la clase, a pesar de que le había repetido a su padre no querer asistir mas a clases este solo negó en todos los pedidos de ella: ¿qué es lo que quería exactamente el mayor?

La clase paso normal, a la hora de comenzar el listado de presentes la mirada de Sunghoon se devastó al notar a la peli roja alejados de ambos, sin mas, dirigió la mirada hacia su amigo buscando respuestas sobre la escena montada de ahora mismo.

─ Me ah dicho que quería estar sola. Por favor . . Démosle su tiempo.─ suplico el castaño en un hilo.

─ ¿Es broma? ¿crees que la dejare sola aunque ella me lo pidiera? ─ cuestionó el castaño menor un poco enfadado.

Jake decidió guardar silencio, sabia qué su amigo iría por ella apenas tocara el receso, se sentía tan triste al no poder seguir el pedido de la peli roja pero acordaba con las razones de su amigo; ella no estaba bien y dejarla sola, solo empeoraría su soledad.

Tal como paso, el receso se hizo presente logrando que la muchacha escapara por encima de todos los estudiantes perdiendo de vista a sus dos amigos, al menos eso parecía.

Alguien sostuvo de su brazo impidiendo el avance de su paso, sabia perfectamente de quien se podía tratar, este mismo jalo su brazo para verla frente a frente; era Sunghoon.

─ Princesa.─ murmuró suave y dulce, este castaño sabia perfectamente que era el punto débil de la contraria.

Olivia desvió la mirada conteniendo las lagrimas que peleaban por salir.

─ ¿Qué pasa? ¿No estas feliz de vernos? ¿Hicimos algo malo? ¿O es que ya no somos buenos para ti?─ tantas preguntas hacían sentir mal a la muchacha quien no tenia el valor de responder.

─ Sunghoon no lo haga-s.─ interrumpió una vez mas el contrario.

─ No te forzaré a que hables y mucho menos a que nos des una explicación de esta decisión, te daremos tu espacio tal como tú lo haz pedido; después de todo, haz anhelado tanto querer deshacerte de nosotros.─ el castaño parecía no medir sus palabras pero es que la muchacha tampoco podía hacer nada, era muy pronto aun.

Logro ver como sus dos amigos se alejaban de ella por primera vez, de seguro decepcionados de ella, no estaba segura si volverían o si al final de todo este problema, ellos quisieran perdonarla.

"Harás lo que yo te ordene desde ahora, si no quieres que tus amigos sufran por tu desobediencia".

─ Solo quiero protegerlos.─ susurro suave conteniendo las lagrimas.