Alex en multimedia._.
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Tasha: Tu y yo nos conocemos. -nos apuntó a las dos moviendo su dedo rápidamente-
TN: No lo se. -me acomodé un mechón de pelo detrás de la oreja y mire hacia abajo-
Tasha: ¿Sabías que es de mala educación no mirar a las personas a los ojos cuando te hablan?
TN: Si, lo sabía.
Tasha: ¿Entonces?
TN: ¿Entonces que? -la miré a los ojos-
Tasha: ¿Nos conocemos?
TN: -suspire- Creo que si, aunque te viene mejor el negro.
Tasha: Eres tu. -entrecerró los ojos-
TN: Si, soy yo.
Profe: Señoritas, por favor, dejen de hablar.
Tasha: -da media vuelta- Ella me tiró una goma en la cabeza.
TN: ¿¡Que!? Eso es...
Profe: ¿Cierto señorita TA? -me interrumpió-
Tasha: ¿No me cree? Es típico que lo hace y miente para salirse con la suya.
TN: Pero yo no...
Profe: Retírese de mi clase, por favor.
TN: ¡OBJECIÓN! -golpeé la mesa con la manos y me pare con el impulso-
Todos me quedaron mirando al igual que el profesor.
TN: Ni siquiera me dejó hablar. ¡Ella está mintiendo! -la apunté-
Tasha: ¿Y por qué lo haría?
TN: Porque me odias. -la atravesé con la mirada-
Profe: Solo... retírese de mi clase.
Gruñi fuerte y al salir di un portazo que retumbó en todo el pasillo. El profesor desde la ventana me miró entrecerrando los ojos. Le seguí el juego. Él volvió la cabeza al pizarrón y siguió con la maldita clase. Caminé sin rumbo hasta que decidí encerrarme en el casillero.
Milagrosamente entré y deje entreabierta la puerta. Instalé mis audífonos en mis oídos y saqué el celular del bolsillo. Me concentré en la música hasta que sentí el ruido de la campana. Abrí los ojos más de lo normal, empuje la puerta tan fuerte que golpeé a alguien. Miré detrás de ésta donde estaba Liset tocándose la espalda con la nariz fruncida.
Liset: ¿Que-mi****-haces-ahí?
TN: Me hecharon de clase y vine aquí...
Liset: ¡Por suerte eres mi mejor amiga, sino ya te hubiera matado!
TN: Yo igual te quiero amiga. -la abracé-
Liset: Agh, sueltame.
TN: Uuyyy. -la dejé- Anda rabiosa.
Liset: Ok, me harté. Tienes 5 segundos para salir de mi vista.
TN: ¿Qué?
Liset: 1...
TN: ¿Que debo...?
Liset: 2...
El rompecabezas se fue formando poco a poco. Entendí cuando llegó a 4. Corrí como si mi vida dependiera de eso, pues porque era así.
Liset: ¡5!
TN: ¡Trata de atraparme!
Liset: -rió- ¡Ahora!
