Al dia siguiente el muchacho de presentó. Con el brazo vendado pero con toda la energia del mundo. Su nombre es Carlos y empezamos a aprender sobre primeros auxilios desde el comienzo, desde cero. Carlos no sabia nada de nada, pero quizo no practicar nada y aprender todo lo que podia aprender del libro. Llevamos una semana entera aprendiendo sobre anatomia humana, primeros auxilios y como tratar con los pacientes. Queria llevarlo a que fuera un paramedico base para que no solo atendiera bien a las personas alrededor, pero para que algun dia le enseñara a otros a seguir adelante y ser mejores cada dia.
Ya llevabamos dos semanas seguidas aprendiendo sobre todo. Ya su brazo estaba mejor y comenzamos a practicar un poco, cuando Vania aparecio frente a nosotros."Hola chicos. Yo se que les dije que tendriamos la ambulancia lista hace una semana, pero al parecer hubo un problema en la aduana de Honduras y no ha llegado aun." nos dijo Vania.
"Si, me imagine que algo habia sucedido pero nos dio tiempo para que Carlos estuviera listo. Y creo que ya es tiempo para que el salga conmigo a las atenciones que tengamos." le dije.
"Si me dices que el esta listo, entonces ya habilitaremos las llamadas al telefono de emergencia. Para que ustedes salgan." nos dijo ella.
"La pregunta importante es, ¿Cuando saldremos tu y yo?" le pregunte.
"Atrevido y directo al grano. Esta bien, aceptare la salida. No hagas algo extravagante, solo una cita tranquila. Hoy a las 8pm. Tu eliges el lugar." me dijo mientras sus mejillas se volvian rosadas y bellas.
"Esta bien. Me gustan las condiciones. La vere a las 8pm en la catedral que tiene el reloj. Lo siento, aun no me aprendo los nombres." le dije.
"Espero que sepa de cual habla, pero alli te esperare." me dijo mientras se alejaba.
Mi corazon latia a mil por hora. Otra vez sentia toda aquella adrenalina que sentia cuando la veia antes. Verla a diario me ponia nervioso y alegre, pero saber que tendremos una cita, me tiene 100% acelerado. Ahora solo debo pensar en que lugar la llevare. Hay un lugar bonito llamado 'Paseo Alameda' y creo que valdra la pena ir alli. Terminamos de practicar con Carlos y ahora debia ir a mi casa. Me subi al busito que llevaba a los empleados y empece a pensar que todas las cosas que podia hablar con ella, el tiempo que no tuvimos juntos, las dudas que tengo sobre los temas que nunca hablamos. Aunque mi primer pregunta es ¿Porque no me dejo seguirla aqui, a Honduras? Pero bueno, eso lo sabria cuando llegara la hora de estar con ella. Llegue a mi casa casi a las 6:30pm y empece a alistarme. Un pantalon jean azul oscuro, tennis negros y una camisa negra tipo Polo. Nada extravagante ni sofisticado, solo seria yo mismo, con un poco de colonia para no oler a sudor y causar una buena impresion.
Son las 7pm y se acerca la hora. Ya que todo esta cerca y aun no tengo auto, camine hasta la catedral. Como un milagro de Dios, hay nubes pero no esta lloviendo, y el clima se siente algo frio. Llegue a la catedral y estaba bella como siempre, siendo la catedral con el reloj mas antiguo de Centroamerica. Todo iluminado, parecia escena de Francia o algo asi, pero en Comayagua. Me acerque al centro del parque que esta frente a la catedral, a la fuente que esta en el centro y alli la vi a ella. Vania estaba alli sentada en una banca de madera, con su vestido negro de tirantes, tan hermosa como la misma noche en la que estabamos."Buenas noches, disculpe que la moleste. Se supone que mi cita estaria aqui esperandome pero no la veo." le dije bromeando.
"Creo que lo dejo plantado señor. No entiendo, ¿porque alguien dejaria plantado a alguien como usted? Si ella no quiere salir con usted, yo estoy libre." me dijo ella siguiendome el juego.
Comenzamos a caminar y platicar. Recordando viejos tiempos, el nombre de sus padres, sus hermanas y hermano, y hasta platicamos de las pequeñas cicatrices que tiene por golpes de cuando era niña. Mientras caminabamos, vimos un pequeño restaurante en el lugar que habia dicho, Paseo Alameda. Un lugar donde venden comida mexicana, al parecer ella ama la comida mexicana y pidio la orden de nachos. En cambio, yo, fui como todo buen gordito y pedi un burrito con todo. Nunca fui fan de comer ensaladas o comiditas suaves cuando salia a una cita y no comenzaria a hacerlo ahora. Quiero que ella vea quien soy en verdad, no finjir nada y cuando vi que ella pidio nachos, sabia que no habria que fingit nada entre los dos.
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Cronicas de un Paramedico
Non-FictionLa vida no siempre es simple. Muchas veces vemos puntos de vista de nuestros seres queridos cuando son atendidos en una ambulancia, pero no logramos ver el punto de vista de quien lo atiende. Mi nombre es Martin y he sido paramedico por los últimos...