Amor Entre Barreras✔️[COMPLETA] (Sin Editar)

El Juicio(Final 1/2)

Capítulo 31
El Juicio(Final 1/2)

Un mes después

—Es una mierda que la escuela no nos permitan a Chase y a mí, ir contigo y con Noah al juicio—respiro nerviosamente mientras Imogen me ayuda a prepararme para el juicio—En serio. ¡No es como si estuviéramos pidiendo ir a los antros, al boliche o algo parecido! ¡Queremos estar ahí para ver a ese imbécil a los ojos y decirle que se vaya al infierno!—Imogen grita con frustración y avienta mis prendas de ropa de izquierda a derecha.

—Imogen, vamos a estar bien.

—Estar bien no es suficiente, Hanna. Necesitas ir en modo asesino—saca una blusa escoltada y hace una mueca—¡Ay dios mío! Sé que tengo algo bueno para poder prestarte  en algún lugar.

—Espera, ¿qué tiene de malo lo que llevo puesto?

—¿Qué tiene de malo lo que llevas puesto? Hanna, como dije, "bien" no es suficiente.

—Pero Imogen...

Antes de poder terminar la frase, Imogen se da la vuelta de manera triunfal sosteniendo dos vestidos.

—¡Ta-chán!—mis ojos se expanden al ver los vestidos que me entrega.

—¡Son preciosos! No creo que pueda pedírtelo prestado.

—Debes usar uno. Es un día importante y necesitas toda la seguridad que puedas.

Trago saliva y veo los dos vestidos que sostengo en la mano.
Tras varios minutos pensando en cuál ponerme, me decanto por una blusa color azul con un estampado de flores negras y una falda con cadenas de color negro. Un atuendo elegante y rudo. Justo cuando termino de acomodar mi falda, llaman a la puerta.

—¿Ya son las 8:00?

—Mierda, sí. Eso significa que Noah ya está aquí para recogerte—antes de abrir la puerta, Imogen se acerca y me abraza—Este es vuestro día.

—Gracias, Imogen.

—Oye, ya te dije que no me agradezcas, somos mejores amigas—me aparto y le sonrío antes de abrir la puerta.

—Hanna, ¿Estás lista?

—Estoy tan lista como puedo estarlo.

—Deberíamos irnos, mi madre está en el juzgado con tu tío y Antonio nos está esperando.

—¡Esperen!

—¡No irán a ninguna parte! ¡Todavía no!

—¿Chase? ¿Jared?

—¿Qué estáis haciendo aquí?—pregunta Noah confuso.

—¿Qué estamos haciendo aquí? ¡Vamos, también vinimos a desearles buena suerte!

—¿De verdad pensaron que los dejaríamos ir sin despedirnos?

Chase y Jared respiran entrecortados por la carrera que hicieron hasta encontrarnos.

—Tomad—me río cuando Chase me entrega un peluche de murciélago.

—Gracias, Chase. Va a ser un amuleto perfecto.