Cuando por fin Derek ha caído rendido en un profundo sueño se ocupa de asegurar cada rincón del loft como la había estado haciendo cada noche. Los amuletos protectores eran menos efectivos por el efecto de las corrientes telúricas, pero era mejor que nada. Tomó del suelo junto a la puerta su bolso cargado con sus pocas pertenencias y dando un último vistazo al salón salió de ahí completamente segura de que él estaría bien.El loft era bonito, pero si seguía ahí un minuto más lo explotaría hasta los cimientos.
Cruzando las puertas del edificio la esperaba su última adquisición de cuatro ruedas -o la que al menos lo sería por el momento- La rubia consideraba un terrible crimen el desperdiciar semejante semental de color negro acumulando polvo en el garaje. Y es que Derek sí que tenía buenos gustos en autos. No tanto como ella, pero no estaba muy exigente al respecto.
Entró al auto dejando a un lado la mochila, acomodó el espejo viendo su reflejo por un momento en él. Los ojos que a muchos los hipnotizaba con su belleza moteada de dos colores, un tornado batallando en ellos. Se veía fijamente tratando de encontrar lo que los demás veían en ellos, más ella solo veía un completo vacío en ellos. Hubo un momento, no hace mucho, donde creyó que ese vacío desaparecía, pero con cada día que pasaba más se preguntaba si solo había sido un simple sueño.
Sacudió la cabeza apartando esos pensamientos y obligó a su mente a pensar en su sobrina. La única razón por la que no había perdido por completo la cabeza. Sonrió al instante. Acomodó bien el espejo y aceleró a fondo haciendo rechinar las ruedas en el asfalto. Ya no podía esperar más, quería verla. Pero no llegaría con las manos vacías.
No había ido a su casa desde que había llegado al pueblo. Priorizando la protección de Derek antes que nada. De hecho, no había hecho otra cosa que cuidar de él y trabajar en la búsqueda de la zorra Argent. Lo hacía por él y el cariño que le tenía a su amigo, pero su subconsciente sabía que la principal razón de ello era distraer un poco su mente de sus preocupaciones. Aplazar lo inevitable e ignorarlo tanto como pudiera hasta que le explotara en la cara.
El viejo edificio que era de su propiedad seguía tal y como lo dejó. Era deprimentemente hermoso ver si fachada original, tan vieja y un poco descuidada, pero igual tenía su encanto.
Subiendo las escaleras se preguntó si es aspecto de su apartamento sería el mismo. Siempre pasaba lo mismo cuando volvía a alguna de sus casas alrededor del mundo. No había pasado mucho tiempo desde la última vez, pero normalmente no dejaba su casa en manos de nadie. Su teléfono vibró dentro del bolsillo de su chaqueta y como pudo trató de sacarlo con la misma mano que sostenía la maleta mientras que con la otra abría la puerta.
Otra llamada perdida del mismo número que aparecía como desconocido, aunque bien sabía a quién pertenecía, pero estaba vez también había un mensaje: «Vuelve» Sus cejas se hundieron hasta casi juntarse, releyendo una y otra vez esa simple palabra creyendo que podría descubrir en qué contexto habían sido escritas. Ese "vuelve" podía ser por muchas razones; control, sumisión, arrepentimiento, ira.
ESTÁS LEYENDO
SIPHON 3 • Teen Wolf
FanfictionLa vida sobrenatural esta basada en secretos y mentiras, pero estos algunas veces llegan a explotar como una bomba de pintura que mancha a todos a su paso. La manada esta cubierta de pintura roja y una diana les apunta en la cabeza. Los secretos no...