Algo de Mí

𝙼𝚊𝚗̃𝚊𝚗𝚊𝚜༄ 3

Las personas tienen poderes que aún no lo han notado, poderes increíbles y hasta mágicos.
Aunque esto no sea un cuento de hadas, vaya que sí se parecía.

A lo largo de los días, esta pareja se volvía más unida: compartían misiones, pasaban tiempo juntos, aprendían de ambos, jugaban y hacían los mismos chistes malos que sólo ellos entendían. Hasta podrían afirmar que compartían las mismas neuronas.

-Oye Fargan, te gustaría ir a una mazmorra que hay por allí?- interrumpe el hechicero.
- Vale, no tengo nada para hacer ahora. ¿Quiénes irían también?.

Fargan se encontraba cosechando unas cuantas patatas del huerto comunitario para luego  dar unas vueltas por el pueblo y ante la invitación de Juan no se pudo resistir, le gusta mucho ir a las mazmorras.

-Irian axo, Auron, Ibai y Focus porque es bastante mamada, ya intentamos ir y casi nos morimos ahí dentro. Es el mismísimo infierno.
-Cuenta conmigo, espera que busque una armadura y vamos.
-Dale, te espero amigo y vamos juntos porque los chicos ya están de camino.

(...)

-Y Auron? - pregunta Axo con las manos llenas de monedas y joyas que encontraron.
-Creo que lo perdimos de comino - contesta Fargan mirando al horizonte.
-No importa, perdimos a Auron pero ganamos al tigre Toño. Considero este día una WIN - dice Juan con una pequeña cría de ocelote en sus manos.
-Qué aquí estoy mamahuevos!- se escucha como Auron grita en la lejanía.

Todos frenan su caminar para ver hacia el lugar de dónde provino el grito.

-Pero dónde estás hijo de puta que no te vemos? - grita ibai mientras con una mano se tapa la luz del sol.
- Allí está - señala focus a un pequeño cuerpo que se asoma con un cofre en sus manos.
-PERO QUE LLEVAS AHI ANIMAL?!- Juan comienza a ponerse nervioso y a correr junto al de mechón de fuego.
- Encontré esto en una sala y tenéis que ver lo que hay aquí. Vais a flipar, desde ya os lo digo.

Dicho esto, todo el grupo aventurero forma una pequeña ronda en la selva y se disponen a abrir el dichoso cofre. Éste contenía unos cuantos libros y pergaminos.

-Libros? Para qué quiero yo unos libros viejos?- pregunta el más joven del grupo .
-Pues para que tú preguntes- responde Auron y tomando uno de los libros, abre en la primera página- son libros de hechicería que enseñan reparación.
-Y? - responde el bicolor.
-Y?! Que son oro puro! Tu sabes lo que valen estos libros? Nos vamos a volver ricos?
-Ostia! Menuda suerte has tenido y cuántos hay allí?- Fargan interrumpe la sorpresa de todos.
-Como unos 20, uno para cada uno y los demás los vendemos.

Un enorme hallazgo que juraron entre todos luego a no pronunciar una sola palabra de que tenían uno cada uno y se dirigieron a sus casas a guardar todo lo que lograron robar.

(...)

Quizás sean pocos los momentos que vivan juntos.
Quizás el destino les tiene preparado algo inmenso.
Quizás no sea el destino pero si el propio castigo que Fargan estaría viviendo.
O quizás estaba cayendo en el peor de los tormentos.

Miles de voces atacaba su cabeza.
"Imbecil"
"Basura"
"Inútil"
"Volverás al infierno"
"Nunca vas a cambiar"

Un remordimiento todas las noches le agobiaba haciendo que esté escribiera cada una de las voces en la pared de su cuarto cuál enfermo mental. Si las voces lo dicen, deben ser verdad.
¿Autoflagelarse? Un poco la verdad, el dolor lo hacía sentir vivo y si nadie lo lastimaba, lo hacia él mismo.

Uno solo era su antídoto, su cura, su remedio, su droga y ese era focus sin saberlo.

(...)

-Vengan a ver el musical todos -gritaba Juan a viva voz por todo el pueblo.