Luego de haber logrado salir del edificio corrieron hasta el parque más cercano. Stiles quería ver sonreír al niño más que nada, esa era su misión en ese momento, hacer que pasará un día divertido que compro un balón y un helado para Spencer.
Reían a todo pulmón cuando rodaban en el pasto o se les iba el balón lejos. Spencer por una vez en su vida se divertía de verdad. No tenía que estar encerrado dentro de esa casa donde sólo veía tele y a su madre llorar abrazada en un rincón. Sentados en el pasto, Stiles le miraba observar los árboles que se movían por el refrescante viento. Se hizo de lado y sacó una bolsita de gomitas de su bolsillo, las sacudió teniendo la atención de Spencer en segundos.
"Toma" se las dio en sus manos.
"¿En serio puedo?" Pregunto observando la bolsa.
"Son todas tuyas Spens" se recargo en sus antebrazos sobre el pasto.
Se quedaron en silencio disfrutando de las risas de demás niños que jugaban con sus padres, eso era lo que el niño veía. Tantas veces había tratado de que su padre lo sacará para que jugarán juntos, pero claramente sólo ganó golpes y quemaduras en sus brazos y cuerpo.
Con una gomita a medio meter a su boca cerró la boca y una solitaria lágrima bajo por su ojo derecho. Stiles que le miraba se le plantó un dolor horrible en su pecho junto a un nudo en su garganta. No lo pensó mucho. Jalo al niño a sus brazos donde Spencer no aguanto más y rompió en llanto, abrazándose con fuerza del castaño. Tantos años había anhelado ese cálido calor.Stiles se dedicó a pasar su mano por su espalda. Aguantando las ganas de ir dónde se encontraba el hombre para matarlo con sus manos por hacer sufrir al niño en sus brazos.
Cuando se tranquilizó no se movió de encima suyo. Los tranquilos latidos del castaño le tranquilizaban mucho.
"¿Q-qué pasará c-conmigo?" Hipo el niño sin soltarlo.
Stiles paso saliva.
"Te llevarán a un lugar donde te cuidaran, ahí estarás seguro" respondió con sus labios en la cabeza de Spencer.
"¿Tú estarás ahí?" Pregunto levantando la mirada. Sus ojos seguían brillosos por las lágrimas derrapadas y lo que menos quería era verlo llorar otra vez.
"No...pero iré a verte todos los días" paso sus dedos por el cabello castaño del niño.
"¿Lo prometes?"
"Lo prometo Spencer"
Cuando dieron las ocho se fueron devuelta al edificio dónde se encontraba una mujer y un hombre de servicios sociales. Spencer se aferró a la mano del castaño al ver que lo miraban a él.
Tenía miedo.
Su pequeño corazón brincaba mucho que sentía que se le saldría en cualquier momento. No le gustaba lo de ir con unos extraños.
Miro suplicante a Stiles quien sonrió triste, se agachó a su altura apoyando una mano en su hombro.
"¿Hicimos una promesa cierto?" Spencer asintió "la voy a cumplir así que tienes que ir con ellos..." les lanzó una mirada para que viera a quienes se refería "y yo iré mañana al salir del trabajo a verte"
"¿Todos los días?" Pregunto mirando a esas dos personas que les miraban.
"Todos los días" aseguró besando su frente para ponerse de pie.
Los de servicio social se acercaron a él empujandolo por la espalda fuera del edificio.
Spencer le sonrió a Stiles con los ojos húmedos "Gracias por llevarme al parque" sacudió su pequeña mano.
Stiles sonrió pasándose un doloroso nudo que se había formado en su garganta.
"Buen trabajo Stilinki, puede ir a casa" Stiles no respondió, sólo salió caminado por las calles donde iban saliendo personas de sus trabajos para ir a casa, las oscuras calles siendo alumbradas por las grandes lámparas y luces de los autos. Saco su celular dónde mostraba su galería y se apreciaba una fotografía que se había tomado con Spencer, su sincera sonrisa le gustaba y esos ojos le recordaban a alguien. Negó triste guardando el aparato en su bolsillo.
Al llegar a casa se fue quitando su ropa, una sonrisa se formó en sus labios al sentir su piel bajo su sacó negro.
Spencer se había quedado con su camiseta.
Tomo un baño frío y salió colocándose sólo un calzoncillo para tirarse a su cama.
¿Qué estarán haciendo? ¿Me odiaran aún?
Cerró los ojos mientras soltaba un largo suspiro. Los extrañaba y había sido egoísta de su parte el irse sin decir nada. Lo sabía pero en ese momento era un chiquillo que le había invadido la tristeza que eso lo hizo apartarse de sus seres queridos, del amor de su vida quien estaba pasando por el mismo dolor que él en ese momento. Lo había hecho sufrir esa tarde y lo sabía, recordar su rostro con esa expresión le dolía mucho. Había veces en donde pensaba regresar y pedirles perdón a todos pero la verdad era que tenía miedo. Miedo de ser mirado mal, ver sus rostros, escuchar lo que tengan que decir y más que nada, miedo a ver que "él" tenga a alguien más a su lado. Estaba en su derecho luego de que lo dejo atrás y lo aceptaba, no tendría por qué esperarlo.
Cayó dormido pensando en él.
Al día siguiente se vistió rápido, eran las seis treinta cuando salía de casa. Siempre era casi el primero en llegar al edificio, buscaba casos sin resolver para poder ayudar. Esa era su forma de tranquilizarse y olvidar su pesadilla. Siempre soñaba con lo mismo, con su pequeño siendo arrebatado de sus brazos, alejándolo de su lado. A las siete cuarenta fueron llegando todos los empleados mirando a la puerta abierta donde se encontraba Stiles absorto en papeles.
Dani que pasaba hizo una mueca.
"Hey Stiles" saludo entrando al cuarto.
Stiles le lanzó una mirada en saludo.
"¿En busca de otro caso sin resolver?" Miro los papeles por encima, desde un simple ratero, allanamientos, un secuestrador de niños y demás pudo observar.
Uno de los marcados era el del secuestrador de niños.
Todos los casos en los que había estado junto al castaño incluía niños. En ninguno faltaba un pequeño e indefenso niño.
No tenía idea del por qué, tal vez porque Stiles quería mucho a los niños o otra razón que no sabía.
Al ver que no le prestaba atención salió del cuarto directo a su lugar.
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Una noche todo lo cambiará (COMPLETA)
LobisomemDerek y Stiles se dejan llevar una noche por el deseo o como ellos lo llamaron "calentura de una noche" sin pensar que esa noche significaría mucho y cambiaría todo.