Por favor, no te vayas.

Primer día.

Harry desempacó rápidamente, pues no llevaba muchas cosas en la maleta.
Lo único que traía consigo era ropa, zapatos, desodorante y sus 2 anillos más preciados: el primer anillo, de plata, con una rosa grabada. El segundo, plateado, una daga grabada.
Esos anillos habían sido comprados con el lo que ganaba siendo cajero en una panadería, tardo al rededor de un año en conseguir el dinero para comprarlos.
El nunca regalaría alguno de sus anillos pues nunca habría alguien que mereciera tener tanto significado en su vida.

Oh boy, you don't know something about the future.

En cuanto termino de sacar sus cosas y acomodarlas, salió del cuarto.
Visualizo a sus papás al fondo del pasillo, su madre tenía cara de preocupación y en sus ojos solo se reflejaban dolor y tristeza.
Por otro lado, el rostro de su padre no mostraba sentimiento alguno, pero en su mirada se notaba decepción y sufrimiento, principalmente lo primero.

Ambos padres miraron a Harry, con lágrimas queriendo escaparse de sus ojos, nadie lloró, pero todos querían hacerlo.
Su madre solo le dio un beso en la frente y su padre, solo le dió la mano.

Harry fue llevado nuevamente a su cuarto, sus padres fueron obligados a irse para poder comenzar con el tratamiento de Harry.
Una vez más, Styles enfrentaba al mundo solo.

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Se quedó observando la puerta, con su alma rota y la cabeza hecha un lío.
Se paró y vió por la ventana que daba hacia la sala general, donde se reunían todos los pacientes durante 3 horas antes de la comida.
Quedó mirando a todos y cada uno de los pacientes, pero uno especialmente llamó su atención.
Estaba sentado en el sillón, con la mirada perdida.
Era un hombre de complexión mediana-pequeña, que estaba hasta los huesos al igual que Harry, un hombre al que a simple vista se le notaban cicatrices de cortadas en los brazos.
Tenía el cabello castaño, la mandíbula marcada, la nariz fina y nos labios delgados.
Era muy atractivo, a decir verdad, pero tenía algo más allá de la hermosura que hizo que la mirada de Harry se podrá encima suyo.

¿Cómo no mirarlo si sus ojos parecían la ventana al cielo?
¿Cómo no mirarlo si era tan hermoso?
No podía dejar de verlo, no sin antes tratar de descubrir por qué en esos ojos encontró la paz que le faltaba aquel día.

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Holaaa, cómo les prometí actualizar más seguido, aquí hay un nuevo capitulo c:

¿Cómo ha estado su semana?

¿Que les está pareciendo la fic, les gusta?

Besos x . x