Sexo en Tailandia (Jenlisa G!P)

Capítulo 11

Lisa.

– Hey, despierta, vas a llegar tarde – hice una mueca al sentir como pellizcaban mis mejillas, abrí los ojos despacio logrando ver a Jennie, habíamos dormido juntas después de darnos duro contra el pavimento

– Ahh... 5 minutos más – inconscientemente abracé a la mayor acercándola un poco más y apoyar mi cabeza en su pecho, podía escuchar sus latidos, me daban más ganas de quedarme así y seguir durmiendo

– Debería despedirte boba – sus manos empezaron a acariciar mi cabeza, se sentía bien estar así, con ella, no pude evitar apretar un poco el abrazo, no quería ningún espacio que nos dividiera, Jennie es realmente suave – tienes que ir al trabajo, h-hay mucho por hacer – la coreana se escuchaba nerviosa y sus latidos eran un poco más rápido

– Tu corazón, parece que esta tocando una batería, tiene ritmo – comencé hacer un mal beatboxing queriendo acompañar los latidos de Jennie – Youh, youh, youh, DJ JEN, wiki, wiki, wiki – la risa de la castaña se hizo presente haciéndome sonreír, levanté el rostro para verla, Jennie es muy linda cuando ríe – iré a ducharme para ir al trabajo, te veo allá – al intentar levantarme de la cama, la castaña tomó mi mano, me voltee a mirarla

– ¿Podemos...podemos ir juntas?, dejaré el auto en el parqueo subterráneo, así no nos verán – mordí mi labio tratando de no sonreír tanto, pareceré loca

– Si, me gusta la idea – ambas asentimos con pequeñas sonrisas, sin quintarle la vista a Jennie caminé de espaldas a la puerta, cosa estúpida porque me tropecé, casi terminando por caerme pero por suerte no paso, hice una seña con mi mano hacia mi jefa la cual se aguantaba la risa de mi estupidez y salí de la habitación

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Me miré por quinta vez al espejo, ya estaba lista para partir al trabajo con Jennie, pero no tenía idea de porque estaba tan nerviosa, tal vez tenía miedo de que nos vieran juntas aunque realmente quiero irme con ella, mi cabeza es un lío. Suspiré, acomodé mi pelo y salí de mi habitación, en ese mismo instante Jennie estaba saliendo de su cuarto, nos miramos y no pude evitar desviar la vista avergonzada, ¿qué demonios me pasa? En silencio nos retiramos de la casa y subimos al auto.

La castaña encendió su vehículo y avanzamos a la carretera, todavía en silencio y no es que me molestaba que no hubiera conversación pero había un poco de tensión que no logró descifrar la razón.

– Pondré un poco de música – Jennie encendió la radio y de inmediato comenzó a sonar ''Me gustas tu'' de Griend – oh, jeje, bonita canción, ¿no?, a ver que más hay – cambió la emisora y ahora sonaba ''Oh My God'' de Gidle

– Esa...esa es muy buena, deja y pongo otra emisora de mis favoritas – ella asintió y me acerqué a cambiar la emisora y esta vez se reproducía una canción de Jojo siwa – sabes, no necesitamos música – ambas reímos de forma nerviosa después de apagar la radio y seguir nuestro camino en silencio

Baje un poco la cabeza a medida que llegábamos a la compañía para que no me vieran pero al bajar al parqueo subterráneo me relajé, Jennie parqueo el auto pero ninguna salió, mirábamos al frente sin decir nada.

– Lisa, verás, hay una tonta fiesta de negocios en un bar, ninguno de los demás empleados les gusta ir porque es tedioso estar hablando de trabajo después de haber salido... entonces me preguntaba si tu pudieras acompañarme, no tienes que hacerlo si no quieres – reí un poco al ver el rostro rojo de la mayor por haber hablado tan rápido sin pausas

– Claro que te acompaño, ¿iremos en tu auto juntas? – pregunté mirándola con una sonrisa que me correspondió-

– Si, es después del trabajo, espérame en la puerta de mi oficina – asentí, luego de despedirnos bajé de su auto y caminé a paso rápido a mi área de trabajo, di algunos brincos y vueltas de la emoción inexplicable que sentía

– Alguien esta muy feliz – Sana me miraba divertida mientras me sentaba frente a mi escritorio y reía tontamente sacando mis utensilios de trabajo – ¿te fue bien en tu cita? – me había olvidado por completo de mi cita con Hirai Momo

– ¿Ah?, emmm si, Momo es muy amigable – respondí pero mi compañera de trabajo no se veía complacida con la respuesta – intercambiamos números para ver si hay una segunda salida y eso – esa respuesta si la alegro, me tomó de los hombros y comenzó a sacudirme

– ¿Ves qué te dije?, tener a alguien alrededor te hace bien – justo en ese momento Jennie paso enfrente de nuestros escritorios, tenía una expresión seria en el rostro pero al cruzar miradas me brindo una pequeña sonrisa que no evite en corresponder

– Si, me gustaría tenerla más tiempo a mi lado – aquello lo dije sin querer, miré a Sana con temor por lo que dije pero por suerte estaba en una llamada con Jihyo contándole mi cita

– Oye, Jihyo dice que ya sabía, fue a espiarte – ¡ELLA ERA A QUIEN SENTÍA MIRÁNDOME!

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Ya era hora de salir del trabajo, le informé a Sana que iría con nuestra jefa a la fiesta de negocios, dijo que rezaría por mi, al parecer son mis aburridas aunque se llame ''fiesta''. Terminé de recoger mis cosas y fui a esperar a Jennie frente a su oficina, no esperé mucho ya que después de unos minutos salió.

– ¿Estas lista?, ¿estudiaste las conversaciones que te dije?, ¿ya fuiste al baño? – confundida por el nerviosismo de la mayor tomé su mano para calmarla

– Si, si y si, tranquila, todo saldrá bien, no te haré ver mal con esos viejos egocéntricos y aburridos – Jennie rio un poco y asintió, luego nos fuimos a su auto y dar marcha al bar

El lugar no quedaba tan lejos así que llegamos en poco tiempo, era un bar bastante sofisticado, la música era clásica pero lo suficientemente alta para tener que subir la voz para hablar. Dentro habían muchas personas, la mayoría se notaba que eran ricachones por la forma en que vestían.

– Vamos, deben estar en la zona de atrás – me sorprendí cuando mi jefa agarró mi mano arrastrándome con ella donde estaban las personas con las que nos reuniríamos, maldita sea, yo también agarré su mano, no tendría que sentirme así

Encontramos a dichas personas y Jennie soltó mi mano haciendo que volviera en si, bien, era momento de experimentar la noche más aburrida de mi vida.

Y así fue, al principio me logré acoplar bien a sus conversaciones, básicamente era ''trabajo, dinero, trabajo, dinero y uno que otro viudo'', pero ya iban casi dos horas y mi limite sociable y mis no ganas de hablar de trabajo estaban apareciendo. Le di un vistazo a Jennie, no sabía descifrar si estaba igual de jodida que yo pues mantenía una sonrisa en su rostro pero la forma de su postura me daba vibras de que tenía ganas de largarse, al parecer notó que la estaba mirando pues nuestras miradas se encontraron, me mostró una sonrisa más suave y luego de mover su cabeza en dirección a los baños le dejó su copa a uno de los empresarios y se fue de mi vista.

¿Eso era una mensaje?, puta madre, ¡era una señal de algo!, tal vez íbamos a escapar de esta porquería de hombre misóginos con dinero, me terminé mi trago y casi corriendo fui a los baños. Cuando entré no vi a nadie pero fueron los labios de mi jefa que me sorprendieron.

– ¿Je-Jennie?, ¿qué pasa? – pregunté entre el beso pero ella sólo sonreía

– Shhh...no tenemos mucho tiempo, necesito algo de acción para poder hablar de nuevo con esos idiotas – sus besos se hacían más persistentes pero como sabrán mi culo es débil, tomé sus muslos y la subí a mi cintura después de cerrar la puerta y así acomodarnos en la mesa del lavabo

El beso era intenso y húmedo, por alguna vez es más excitante es tener miedo de ser descubiertas en este momento, bueno era excitante ya que sentimos unos flashes que nos hicieron separarnos y poder ver al propietario.

– Vaya Lalisa, no esperaba nuestro segundo encuentro de esta forma y junto a mi ex – la persona miraba su cámara y luego nos miró con una sonrisa

– ¿Ex?, ¿segundo encuentro?, ¿Hirai Momo? – bueno, no iba a ser una noche aburrida después de todo