Sexo en Tailandia (Jenlisa G!P)

Capítulo 15

Lisa.

- ¿Crees que te voy a prestar el auto luego de haberme desobedecido y usarlo sin mi permiso? - luego de mi trato con Dahyun me había regresado al apartamento del Sahyo unas horas después con la esperanza de que sólo estuviera Sana, obvio no fue así

- Bebé, no seas dura con ella - Sana intento calmarla y apoyarme pero no creo que sea buena idea

- Oh, yo soy la dura aquí he, tu tienes que ser la divertida he, agarra una olla tu también, manos arriba - sentí el latigazo que le dio Jihyo a Sana haciendo que esta última agarrará una olla levantando los brazos sin poder bajarlos como yo

- Jihyo, ya te pedí disculpas, en serio perdón pero en verdad necesito el auto, de ello depende mi vida amorosa - la miré con la cara de hija suplicante, pero no estaba funcionando - si no me lo prestas me meteré al reguetón - de inmediato recibí las llaves del auto para luego lanzarme a abrazar a Jihyo-

- Tú no, sigues castigada - la mayor intento unirse al abrazo pero Jihyo le apunto con la correa para que volviera a la posición del castigo

Luego de haber conseguido el permiso del usar auto que por cierto me sentía como mis 17 de nuevo pidiendo el auto de mi padre prestado pero bueno, ahora debía buscarme ropa para la cita y obviamente tendría que ir a la casa que comparto con Jennie, deseaba con todas mis fuerzas que no estuviera ahí, que Dios me escuchará una vez en la vida y por supuesto no fue así, su auto estaba parqueado frente a la casa, suspiré y entre a este tratando de ser silenciosa, con algo de oraciones estaría durmiendo o algo.

No la vi en la sala o la cocina así que corrí directo a mi habitación pero extrañada noté un gran bulto bajo las sabanas de mi cama, confundida y a la vez preocupada me acerqué y retiré la sabana revelando a la linda castaña que me tenía como idiota, estaba dormida plácidamente en mi cama, también me percate que llevaba la misma ropa de anoche haciéndome pensar que tal vez no fue al trabajo pero puede que este equivocada.

- ¿Lalisa?... - me había quedado mucho tiempo mirándola que ni siquiera noté que había despertado, al verme sus mejillas se tornaron levemente rosadas

- ¿Qué haces en mi cama? - pregunté curiosa ella al parecer recién se daba cuenta de ello y salto fuera de esta mirándome muy nerviosa

- ¡Nada!, ¿qué haces tú aquí?, pensé que no volverías tan rápido - me quede callada a su pregunta, ¿debería decirle?, tal vez le daría celos

- Vine a darme un baño y ponerme algo lindo para esta noche, tengo una cita - mordí mi lengua para no mostrar alguna emoción que me delate pero me fue imposible no asustarme al ver la cara de culo estreñido que tenía Jennie por mi respuesta

- ¡Ja!, pensé que estabas enamorada de mi pero veo que solo te gusta el drama, ¿no? - la miré confundida - solo eres una flacucha entregada he, te gusta mi atención, me preocupaba que seas diferente a las otras chicas con la que me acostado - no quise dejarla hablar, me acerqué y tomé sus manos acercándome a ella

- Lo que dije no es mentira Kim Jennie, me gustas mucho, haría lo que sea por ti, no iría a la cita si tan solo tu me lo pides - la miraba fijamente a los ojos esperando con ansias que me dijera que no y me quedara con ella

- Haz lo que quieras Lalisa, es tu vida pero recuerda que mañana debes limpiar este lugar, esta muy desorganizado desde la visita que me hizo Hirai Momo - no pensaba arrastrarme más, muy bien Jennie sabía que estaba a sus pies para que tenga que arrodillarme frente a ella ahora así que simplemente asentí y tomando mi toalla me dirigí al baño para prepararme para mi cita

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Me eche un poco de perfume y me miré al espejo me veía bien homosexual, justo lo que buscaba, otros lo llamaran ropa de vago, yo lo llamo lesbiana hippy chic. Salí de mi cuarto rumbo a la puerta de salida de la casa, Jennie estaba en el sofá mirando su teléfono, suspiré y me obligué a dar los primeros pasos fuera de mi no tan querido hogar porque si duraba mucho tiempo viendo a mi jefa es probable que me quedé como perro enchulado a su lado, un aceptable ejemplo.