Dama
ya habíamos salido del baile, nos habíamos aburrido y estábamos yendo todos juntos caminando hasta otro baile a ver que salía, somos diez pelotudos y la mitad esta en pedo ya
-¿te sentís bien?- escuche a mateo
estoy tan en la mía que me había olvidado que él estaba al lado mío y volví a la realidad cuando paso un brazo por encima de mis hombros
lo mire y sonreí
-si, todo bien.
-¿segura? mira que podemos irnos a mirar anime tranquilamente.- me reí ante sus palabras
él se había negado tanto a ver anime y cuando deje de insistirle, se quejo por que ya no le insistía mas para ver anime
al final termino gustándole aun que no lo vea subtitulado y yo me estoy acostumbrando a ver anime doblado
de alguna forma nos estamos acostumbrando al otro
-no, estoy bien.- asintió
-¿te parece si vamos a desayunar?
-me parece bien.
-o vamos a una heladería, lo que prefieras
- me cabe más que pidamos unas pizzas o hagamos algo nosotros.- asintió
-¿no tenes frío?
-un poco, pero ahora cuando entremos me va a dar calor.
-ponete.- me dio la campera que tenía en la mano
- no, posta que me va a dar calor.
-ponete la campera encima de los hombros al menos, me da cosa verte con ese top sólo
-bueno, dame la campera. denso.- giré los ojos y agarré la campera
Me la pase por encima de los hombros Y me agarré del brazo de Mateo para seguir caminando
El baile estaba a tres cuadras de donde estábamos hasta recién, no era muy lejos y así que podíamos ir caminando tranquilos
Llegamos y pasamos de una, el dueño es el tío de Sara y pasábamos sin ningún problema
-nosotros vamos a buscar para tomar.- dijo Cami yéndose con Pablo
-Nosotras vamos a bailar.- Sara me agarró de la mano y me alejo de Mateo
Empezamos a bailar, riéndonos y siendo nosotras como cuando teníamos dieciséis y no nos preocupaba nada
Antes de que quede embarazada de Luca para ser más exacta
En un punto de la noche mire a mi grupo y me Di cuenta de que Mateo me estaba mirando al igual que Cami miraba a Sara
[...]
Mientras Mateo estaba acostado así nomas viendo anime, yo había ido a cambiarme
Me había prestado un short y una remera de él para que duerma más cómoda y se lo agradecí en todos los idiomas casi
Se me había ocurrido salir a bailar con un short tiro alto de Jean y un top que lo único que me tapaba eran las tetas
Idea de Sara para conseguirme wacho nuevo, según ella
Yo no tenía nada que ver, simplemente le preste mi cuerpo para saber si le iba a quedar bien el conjunto
Cuando me acosté con Mateo A ver anime, gemidos empezaron a escucharse
Ninguno de los dos parecía estar incómodo por los sonidos sexuales de nuestros mejores amigos
Mateo seguramente por haberle prestado muchas veces la casa a Cami y yo por haber cogido con Sara en más de una ocasión, y haber echo tríos juntas
Llegó un momento de los gemidos en los que a mi mente vino el cuerpo de Sara desnudo disfrutando y quise estar con ella
Inconscientemente, como nos pasa a todas, empecé a mojarme y sentí la necesidad de llevar una mano a mi entrepierna
Mire a Mateo y él me miro a mi
-tengo... tengo que ir al baño.- dije levantándome de la cama
Salí rápido de su cuarto y me encerre en el baño, me mire en el espejo y me Di cuenta de que tenía los cachetes rojos
Me moje un poco la cara y la nuca, buscando alejar el calor que emanaba mi cuerpo, sin lograrlo
Me seque las manos con la toalla que estaba ahí y volví al cuarto con Mateo que estaba mirando el techo en completo silencio, dejando de lado los gemidos de Sara
Volví a acostarme con cierta incomodidad y me quedé igual que Mateo: mirando el techo y escuchando los gemidos
¿quería matarme? Si
La mirada de Mateo se cruzó con la mía y sonreí
-¿querés coger?- le pregunte de una y él se rio
No me respondió y me beso, haciéndome saber que su respuesta era un si.
Me costaba respirar con la intensidad del beso, pero no podía pensar en eso
Y deje de pensar en respirar cuando sentí la mano de Mateo recorrer uno de mis muslos para llegar a mis pechos
Cuando su mano entró en la remera una incomodidad me recorrió el cuerpo y se instaló en mi zona sensible
Habían pasado meses desde la última vez que alguien me había tocado de esa forma, con tanto deseo
Lo Di vuelta quedando sentada encima de él, sintiendo su erección y me saque la remera que molestaba para acto seguido hacer lo mismo con la suya
Si mi entrepierna no era una laguna, pega justo en el palo
Moviendome en círculos encima de Mateo, reparti besos por su cuerpo, desde su pecho hasta su boca
En el momento en que ninguno de los dos aguanto más, empezamos a sacarnos todo lo que cubría nuestras partes, dejándonos completamente desnudos ante el otro
Y así cerramos la noche, entre gemidos y polvos
