Entre tanto... se excluyen

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Amar es huir de la realidad y la realidad es huir del amor.
¡Esfuérzate, vamos! por amar, por ignorar la cara de la realidad y de la verdad.
Que podrás ignorarla por un tiempo, le pondrás una manta encima para no ver su rostro.
Pero ahí estará.

Siempre ha resultado más fácil no querer ver las cosas.
Porque lo escueto duele y lo adornado es más llevadero.
Ama para adornar, pero los adornos se caen.

Siempre ha resultado más difícil ver las cosas como son.
Escuetas y crudas, pero no hay nada más real que eso.
Real y tangible. Acéptalo como es y no lo decores. Es lo que es y así será.

Eso sí, si encuentras una escalera que te saque del fondo del abismo, úsala. 
Y aprovecha lo poco que tiene la imaginación para ofrecerte para que decores
la realidad como te plazca. 

Sube hasta las nubes todo lo que puedas y disfruta sin arrepentimientos.
Al final te caerás al fondo de nuevo, cual desdichado en busca de sentido.
Para luego volver a subir.
Y entonces le harás honor a Sísifo.



Garabato PoéticoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora