EL REY DEMONIO

CAPÍTULO 72

Quien diseñó los personajes de este mundo hizo un gran trabajo. Bai Yang elogió desde el fondo de su corazón. Luego bajó la cabeza y continuó frotándose el muslo.

Después de lavar las hierbas medicinales de su cuerpo, todo lo que quedaba era ese lugar incómodo.

Se hundió lentamente hasta que solo sus ojos y nariz estuvieron fuera del agua. Su cuerpo entero sumergido, usando el agua como cobertura, se estiró hacia atrás, tratando de limpiar lo que había adentro.

Anoche le dejó un mal sabor de boca.

La primera vez fue muy rápida. El Rey Demonio llegó poco después de entrar. Bai Yang pensó que era rápido como un pistolero. Con resentimiento en su corazón, se rió del Rey Demonio. Pero la segunda vez terminó bien entrada la noche, y la tercera se prolongó hasta casi el amanecer.

De principio a fin no había ninguna técnica, todo lo que el Rey Demonio sabía era empujar. Afortunadamente, el cuerpo de Bai Yang era fuerte. Sufrió durante la primera mitad de la noche con dolor, la segunda mitad con entumecimiento y una sensación que no podía describirse.

Bai Yang no quería volver a experimentar ese sentimiento.

¡Monstruo!

Apretó los dientes y se volvió hacia el Rey Demonio, y lo vio ocupado limpiándose, sin prestar atención a Bai Yang.

Bai Yang rápidamente estiró sus dedos hacia ese lugar.

Después de sentir que estaba más o menos limpio, se subió a la orilla del lago y restregó la ropa que arrojó al suelo húmedo.

El mundo entero estaba en silencio, solo se podía escuchar el sonido de él lavando su ropa. Una vez que estuvieron limpias, las escurrió. Cuando se dio la vuelta, casi chocó con alguien. No se había dado cuenta de que El Rey Demonio apareció detrás de él. El aire que rodeaba su cuerpo era peligroso y sus ojos parecieron parpadear en rojo por un momento.

Bai Yang se sobresaltó y dio un paso atrás, hacia el agua.

"¿Su Alteza?" Él preguntó: "¿Cuándo viniste?"

El Rey Demonio de la Noche Eterna estaba tan quieto como una roca, Bai Yang no había visto al Rey Demonio venir detrás de él.

Lo que lo hizo sentir aprensivo fue el aire alrededor del Rey Demonio. Fue frenético, volutas de negro se derramaron de su cuerpo y se enroscaron a su alrededor, volviéndose más y más gruesos.

"En este momento." La voz del Rey Demonio era ronca. Miró a Bai Yang, el rojo en sus ojos se volvió más notable.

Los años de instinto de combate cuerpo a cuerpo hicieron que Bai Yang se sintiera incómodo, se dirigió hacia la orilla cercana y dijo: "Ya terminé de lavarme, vámonos".

Mientras hablaba, se puso la ropa mojada para cubrir su cuerpo.

Antes de que pudiera llegar a la orilla, la figura del Rey Demonio apareció frente a él, bloqueando su camino.

"¿Su Alteza?" Bai Yang fue obligado a regresar al agua.

"Yo ...... parece que me he desviado de qi". El Rey Demonio frunció el ceño, extendiendo la mano para agarrarlo.

"¡Mierda!" Bai Yang saltó y comenzó a nadar hacia el medio del lago. ¿Quieres hacer eso de nuevo? ¡No me engañarás!

¡Su trasero mejoró!

El Rey Demonio estaba pisándole los talones, saltando directamente al agua también.

Al verlo perseguirlo y consciente de que algo no estaba bien, Bai Yang comenzó a nadar más rápido por el miedo. Quería nadar hasta la orilla opuesta y sacudirse al Rey Demonio. Mientras nadaba, sintió que el agua absorbía su cuerpo y lo frenaba.