EL REY DEMONIO

CAPÍTULO 73

Tardaron unos tres o cuatro días en llegar al Palacio de las Tinieblas Eternas. Acababan de pasar por las puertas del salón principal cuando Hua Feihua, que había quedado a cargo, salió corriendo. "Su Alteza, finalmente regresó."

Si no fuera por su voz, Bai Yang casi no podría decir cuál de los Reyes Demonio frente a él era el real y cuál era falso.

Hua Feihua era uno de los practicantes más hábiles de magia ilusoria en el Reino Demonio y su acto de Rey Demonio no tenía fallas. Si el Rey Demonio tuviera que irse por asuntos personales, a menudo haría que Hua Feihua fingiera ser él y lo dejara a cargo en el Palacio de la Oscuridad Eterna.

Hua Feihua estaba visiblemente estresado por pretender ser el Rey Demonio. Afortunadamente, no pasó nada realmente importante recientemente. Mientras hablaba, barrió discretamente su mirada sobre Bai Yang. La curiosidad en sus ojos era clara.

"Tu has trabajado duro." El Rey Demonio le dio una palmada en el hombro y le indicó a Bai Yang que lo siguiera al salón del palacio.

Hua Feihua quedó bastante satisfecho después de recibir elogios. Levantó su ilusión y volvió a usar ropa de mujer.

Luego miró a Bai Yang. "¿Para qué salieron Su Alteza y Lord Xie esta vez?"

Bai Yang miró hacia el Rey Demonio.

El Rey Demonio confió en Hua Feihua y le dijo la verdad. "Hicimos un viaje a la Ciudad Espina de Fuego para librar a Zetian del Renacimiento Gu".

"¿Entonces resulta que Lord Xie tenía un Renacimiento Gu dentro de él?" Exclamó Hua Feihua.

Se volvió hacia Bai Yang y dijo en un tono amargo y envidioso: "Señor Xie, su Alteza es realmente bueno contigo".

Bai Yang tosió, un poco avergonzado, y evitó su mirada inquisitiva.

"¿Hiciste algo más que curar el veneno?" Preguntó Hua Feihua, sospechoso, su frente blanca ligeramente tensa.

"Además de curar el veneno, ¿qué más podríamos haber hecho?" Bai Yang estaba confundido.

Hua Feihua se volvió y barrió con su mirada los cuerpos de Bai Yang y el Rey Demonio. Luego, como un perro, olfateó. “Este olor no es correcto. Definitivamente hiciste algo más. No intentes ocultármelo."

Al darse cuenta de a qué se refería, Bai Yang inmediatamente se sintió extremadamente avergonzado. Mierda, ¿esta persona es un perro?

Luego recordó que Hua Feihua era el jefe de la organización de inteligencia, por lo que, por supuesto, sería difícil ocultarle algo. Tarde o temprano, Hua Feihua descubriría lo que sucedió entre él y el Rey Demonio.

Sin embargo, Bai Yang no quería que se descubriera tan pronto. Todavía quería salvar la situación.

Después de vivir en este mundo y tratar con el Rey Demonio durante tanto tiempo, Bai Yang había perfeccionado la capacidad de mentir con la cara seria. Entonces, a pesar de que su corazón latía con fuerza en su pecho, su rostro permaneció tranquilo.

“Mientras estábamos en el camino, comimos un poco de carne de serpiente. Ese debe ser el olor que estás oliendo."

Hua Feihua negó con la cabeza. “De hecho, hay olor a carne de serpiente, pero hay otro olor más fuerte…. Parece ser el de sus cuerpos…. Extraño, son los dos aromas individuales, pero ¿cómo se mezclaron y por qué es tan fuerte?"

Parecía incapaz de entender y levantó la cabeza para preguntarle a Bai Yang: "¿Qué hicieron ustedes?"

La frecuencia cardíaca de Bai Yang aumentó, e internamente gritó: ¡Por favor, deja de preguntar!