CAPÍTULO 100

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Zhou Ying estaba muy familiarizado con la secta de las nubes elevadas, por lo que podía llegar con mucho cuidado al pie de la montaña mientras evitaba las trampas. Los dos se detuvieron en la barrera, incapaces de abrirse paso a la fuerza. Solo podía entrar un discípulo con la ficha de entrada.

"Papá, no te preocupes". Zhou Ying lo consoló, probablemente temiendo que Bai Yang estuviera preocupado. "Cada dos horas había un grupo de discípulos que bajaban a patrullar, podemos encontrar algunos que están separados ..."

Bai Yang entendió de inmediato lo que quería decir y asintió con la cabeza: "Sí".

Sería mejor si pudieran obtener el paquete de datos sin alarmar a nadie, en el peor de los casos, pueden entrar por la fuerza, no es que no lo hayan hecho antes.

Los dos se escondieron en un gran árbol como panteras.

Probablemente aburrido, Zhou Ying preguntó en voz baja: "Papá, ¿qué es exactamente eso importante, cómo se ve?"

Bai Yang pensó: ¿A quién se supone que debo preguntar si me preguntas?

Dijo con mucha calma: "Lo sabremos cuando lleguemos".

Zhou Ying probablemente adivinó que no quería hablar de eso, así que volvió a preguntar: "¿El Pilar Fronteriso está realmente en la Secta de las Nubes Elevadas? ¿Como supiste?"

Bai Yang pensó: Porque leí la novela.

Después de pensar por un momento, dijo: "De mis investigaciones".

Zhou Ying originalmente quería profundizar su vínculo padre-hijo, pero Bai Yang no permitió una oportunidad. Incapaz de continuar con la incómoda conversación, se calló y miró fijamente el camino más adelante.

Un momento después, aparecieron dos jóvenes vestidos con la ropa de discípulo de la Secta de las Nubes Elevadas.

La Secta de las Nubes Elevadas patrullaba en grupos de dos, en lugares fijos.

Bueno.

Sin necesidad de que Zhou Ying dijera nada, Bai Yang flotó en silencio, aterrizando suavemente detrás de los dos discípulos y los dejó inconscientes cuando Zhou Ying gritó: "¡No los mates!"

Bai Yang se inclinó y encontró las fichas de entrada sobre ellos, arrojándole una a Zhou Ying.

"Vamos." Dijo Bai Yang.

Zhou Ying estaba un poco avergonzado, realmente pensó que Bai Yang estaba a punto de matarlos en este momento.

Bai Yang no parecía importarle, presionando la ficha contra la barrera. Se abrió una brecha y entró, con Zhou Ying siguiéndolo.

Todo sobre la Secta de las Nubes Elevadas era muy familiar para Zhou Ying, dirigió a Bai Yang y evitó todas las trampas, llegando a una pequeña colina poco después.

Había muchas casas en la colina, todas construidas con mucha solidez. Estaban divididos en un montón de habitaciones pequeñas, cada una de las cuales albergaba a dos personas, con un par de habitaciones más grandes que albergaban a una docena de personas.

Con una mirada, Bai Yang se dio cuenta de que aquí era donde vivían los discípulos de menor rango.

Zhou Ying llevó a Bai Yang a una habitación en la misma esquina, atravesó la cerradura y entró. La habitación era muy pequeña, relativamente limpia, con una sola cama.

Bai Yang recordó que en la novela, a Zhou Ying no le gustaba quedarse con otros, así que intentó todo lo que pudo para que lo pusieran en esta habitación.

EL REY DEMONIODonde viven las historias. Descúbrelo ahora