-Bien, ahora serás mi perra.- comenta Wakasa agarrando a la chica de su camisa con fuerza para así quedar a centímetros de su cara. Este le escupe en su rostro sangre. Pero a ______ no le importaba eso en ese momento estaba más preocupada en no cerr...
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El pelinegro aventó el cuerpo del chico al suelo al piso para así colocar su pie encima en su espalda, el contrario solo se queja de dolor por la fuerza.
—¿quien es el?.— susurran entre sí viendo al chico
—¿no le conoces?.— susurra otro tipo de ahí.— el es Kayo.
La mirada gris del chico fue a los otros tipos que estaban parados estaban nerviosos, sin más Kayo camino a ellos y estos no lo pensaron para comenzar a correr.
—Tsk, miedosos.— susurra Kayo metiendo sus manos a sus bolsillos. Sin más comenzó a caminar lentamente sin importar que una gran multitud le estaba viendo.
Era una persona alta, tenía su cabello negro y blanco, sus ojos eran de un color gris con azul, tenía dos aretes en una oreja. Traía puesto un pantalón negro y una sudadera algo grande de su talla.
Causo muchas miradas hace unos minutos porque estaba fumando Kayo en espera de su autobús pero unos tipos intentaron robarle. Lo que no sabían es que ese era Kayo, el famoso mariposa negra.
Siempre se encontraba con otras personas haciendo de las suyas, como robando dulces golpeando a personas, quemando autos cosas de adolescentes según ellos.
Otros les llamaban por su apellido Kayo ya que nadie sabía su primer nombre, mariposa negra y hasta el gemelo Kayo.
El gemelo o gemelos Kayo, se les conoce así porque siempre esta con su hermano un pelirosado que a simple vista se ve buena persona.
También como el trío inseparable ya que siempre les acompaña un castaño a todos lados.
Si les ves juntos no es nada bueno para ti, pueden robarte o solo golpearte.
Mientras iba caminado Kayo, muchas miradas de chicas estaban en el pero este le daba poca importancia. Paro de caminar al encontrar por fin el local.
Tuvo que caminar por culpa de esos idiotas, estaria esperando el autobús pero estaba seguro que los tipos escaparon para pedir más refuerzos. Será muy fuerte pero no iba a poder con un grupo en masa.
Entro al local para así caminar entre los pasillos, estaba en una tienda donde solo vendían cosas de mangas. Era fan de esas cosas intentaba leer como los que estaban de moda y los que no.
Mientras iba caminado su mirada se fijo en un pequeña niña de cabello rubio estaba llorando, estaba perdida.
Podría ser Kayo que se metía siempre en problemas, pero los niños son lo único inocente en este mundo eso es lo que creía.
Camino donde la pequeña para así aclararse la voz y la pequeña voltee. Esta se sonroja al ver tal chico tan simpático.
—¿Estas perdida no?.— comenta alzando una ceja.
—Si.— balbucea nerviosa la pequeña
—Soy ______ Kayo pequeña no te preocupes.— le sonríe de lado la chica, causando que Emma se sonroje ya que pensó que era un chico. Pero al escuchar su primer nombre supo que era una chica.
