Mami villano

Capítulo 53: Dos promesas

KIHO notó que el Mana del Emperador Aku estaba aumentando a un ritmo alarmante. Y como sucedió, el Dragón Azul y el Tigre Dorado en cualquiera de sus lados también estaban comenzando a volver a su tamaño original. Se decía que ambas Bestias Antiguas eran tan grandes como una montaña.

Si el Dragón Azul y el Tigre Dorado lograron volver a su estado original, entonces todo el Castillo Vania definitivamente se derrumbaría. Ah, tacha eso. ¡El castillo y todo el Bosque de Enryu podrían desaparecer del mapa!

Eso significaba que todos en el área morirían. Sí, incluyéndolo a él. Desafortunadamente, sellar la réplica del Fénix Rojo había agotado su Mana. No le quedaba suficiente para protegerse una vez que el emperador Aku se volvió loco.

"¡Su Majestad!" Gritó Kiho. No quiso faltarle el respeto al emperador levantando la voz. Solo necesitaba gritar porque apostaba a que el emperador estaba demasiado enojado para escuchar a nadie ni a nada a su alrededor. "¡Por favor no hagas esto!"

[Tengo muchas ganas de golpear a Su Majestad ahora mismo].

No era bueno para calmar a otras personas porque él mismo tenía un temperamento desagradable. Pero en esta situación, tenía que hacerlo si quería vivir.

"Su Majestad, tengo entendido que está enojado por lo que le sucedió a Su Alteza Real", dijo Kiho. "Pero volar toda el área no la salvará".

No funcionó.

De hecho, el Mana del emperador continuó creciendo más rápido.

Pensó en una forma de hacer que el emperador volviera a sus sentidos. En realidad, no quería usar esto. Pero no tuvo elección. Además de querer salvar a todos, también quería volver a Tilly vivo y de una pieza.

Kiho respiró hondo y luego gritó las siguientes palabras a todo pulmón. "¡Sálvame, hermano Aku!"

Dios, quería morir de vergüenza.

Y bueno, si los consejeros o ministros del emperador le hubieran oído llamar a Su Majestad por su nombre, lo habrían apresado y ejecutado.

Pero tenía permiso. Cuando el emperador Aku lo tomó bajo su protección cuando era un niño pequeño, no sabía que era un príncipe heredero durante ese tiempo. Pensó que era solo otro mercenario como él. Y, uh, solía llamarlo "Hermano Aku" entonces.

[Maldita sea.]

De todos modos, cuando se enteró de que el Emperador Aku era el príncipe heredero del imperio durante ese tiempo, inmediatamente dejó de llamarlo "Hermano Aku". No importa cuánto se burlara de ellos Su Majestad en ese momento, nunca volvió a llamarlo así de casualidad.

Un día, el Emperador Aku le dijo que si su vida corría peligro, podía llamarlo "Hermano Aku" nuevamente y pedirle que lo salvara.

[No puedo creer que acabo de hacer eso].

Afortunadamente, pareció funcionar.

El Mana del Emperador Aku comenzó a disminuir y las Bestias Antiguas también dejaron de crecer en tamaño. Unos momentos después, el Mana del emperador finalmente se estabilizó. Entonces, el Dragón Azul y el Tigre Dorado desaparecieron en el aire.

"Kiho."

Kiho se inclinó profundamente cuando el emperador se volvió hacia él. "Mis más sinceras disculpas por llamarlo por su nombre, Su Majestad".

"Levántate," dijo el Emperador Aku. "No tienes que disculparte por hacer algo que te di permiso para hacerlo".

Cuando miró al emperador, se sintió aliviado al ver que ahora estaba realmente tranquilo. "Su Majestad, el Sumo Sacerdote podría curar a Su Alteza Real. Yo me encargaré de todo aquí, así que por favor no se preocupe".