Veo a un niño vestido de blanco sonreír desde la escalera, hacia mi ataúd.
La vida está pintada de esperas.
Como cuando me dijiste que me querías,
pero te fuíste.Culpa,
ten cuidado con la pena.Te lo advertí
y aún así probaste la sangre de aquel que te dijo que si, sin mirarte.Como si fuera fácil engañar al error.
Cometiste el crimen de los cobardes,
y ahora cuando me besan ya no siento el corazón.Perdí la fé de los gigantes en alguna puñalada que quería quedarse con mi dolor.
Mis manos tienen hambre
y mi cama está llena de martes
que ya no quieren quererte.
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PoetryVeo a un niño vestido de blanco sonreír desde la escalera, hacia mi ataúd. La vida está pintada de esperas. Como cuando me dijiste que me querías, pero te fuíste.