Egotistic ❦ Kookmin

04

2 meses antes

(Versión Jimin)

Su día fue arruinado desde que su jefe le indicó que tendría que hacer un turno extra durante toda una noche en días donde supuestamente eran de descanso. Tuvo que fingir una sonrisa sin perder aquella postura respetuosa y aceptar el favor en el cual estaba obligado a comprometerse o de lo contrario perdería su trabajo si se atrevía a abrir la boca.

Jimin siempre era muy agradecido. Cualquier oportunidad que se le atravesaba en la vida la aprovechaba al máximo porque era consciente que muchas personas no contaban con el mismo estilo de vida que él. Sin embargo, también sufría sus propias dificultades y su carácter no le permitía tan siquiera sacarlas a flote, una de ellas siempre era su empleo.

Había tenido mucha suerte de ser contratado como mozo en un restaurante—bar gracias a uno de sus vínculos más cercanos. Cualquiera que no estuviera familiarizado con aquella profesión diría que no es razón como para quejarse ni siquiera para terminar exhausto, pero la realidad es que cualquier trabajo te gasta tanto física como emocionalmente.

Lo que menos quería era parecer un envidioso, pero a pesar de todo su esfuerzo todo indicaba que jamás iba a ser suficiente como para conseguir un aumento. Mientras otros reciban un mejor pago por solo permanecer sentados rascándose la panza, Jimin terminaba exhausto, cuestionándose cada día el porqué estaba en un lugar donde explotaban a sus empleados.

Sin embargo, la respuesta era la misma: necesitaba el dinero para sobrevivir.

Había momentos donde debía organizar exactamente todo lo que cubriría durante el mes como comidas y cosas personales para no quedarse sin ninguna moneda y sufrir antes de su próximo sueldo. Tenía el tiempo contado y cada vez se le hacía más difícil seguir el ritmo, en varias ocasiones a causa de su frustración y estrés, pensaba seriamente en tirar todo por la borda, pero siempre llegaba a la conclusión de que viviría el mismo infierno o tal vez incluso uno peor.

—Necesito un descanso o moriré pronto—pensó en voz alta mientras se encontraba boca arriba sobre su cama.

Miro la hora una vez más para darse cuenta de lo tarde que dormiría otra vez, no quería recordar que a la mañana siguiente le esperaba un día realmente agotador donde tendría que lidiar con un sin fin de personas groseras e hipócritas donde su únicas preocupaciones eran presumir la riqueza que tenían en su poder

Froto sus ojos con frustración y tomó una de sus almohadas para abrazarla con fuerza antes de ponerla sobre su rostro y comenzar a gritar en ella. Estaba llegando a su limite y lo sabía. No aguantaría mucho tiempo más sino encontraba una solución cuanto antes.

De pronto escucho a su celular vibrar aún lado suyo.

Desganado y sin fijarse quien le llamada a altas horas de la madrugada, atendió.

—¿Quien?—respondió con un tono de fastidio y brusquedad.

—Pensé que ya estabas dormido.—una voz familiar estaba del otro lado de la línea.

—No, pero si lo hubiera estado me habrías despertado—dijo con obviedad.

Escucho una pequeña risa que lo hizo sonreír un poco.

—¿Que sucede, Tae?

—Solo quería saber si mañana tienes con que transportarte, el lugar queda lejos de tu casa y no creo que tengas planeado irte caminando.

Al escucharle, directamente llevo la palma de su mano hacia su frente. Siempre era organizado y jamás se le pasaba ningún detalle, pero su mente había estado abrumada estos últimos días que olvidó por completo pagar y apuntarse en la lista de empleados que querían ser traslados al evento.