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DAEGU-BUSAN, 17-07-2010

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A veces la vida te sonríe tiernamente, vives en un mundo color rosa el cual solamente eres feliz ciegamente. Aunque dicen que después de la tormenta viene el arcoiris, yo no lo creo así, aquí solamente hay problemas y más problemas, realmente no sé si estoy haciendo esto bien y me da miedo. ¿Qué será de mí y mis pequeños?, ¿porque tenemos que sufrir nosotros? no hemos hecho nada malo ¿o sí? Sólo quiero ser normal como otros niños, ser feliz, ir a la escuela, tener muchos amigos, jugar en un parque, casarse para tener una bonita familia. Pero no es así, solamente quiero sobrevivir para proteger a JiMin y a Taehyung de este mundo tan cruel y así será.

Nosotros trabajamos con Noona, le ayudamos a hacer su trabajo de la mansión de la señorita Ahn, aunque a veces pienso que somos un estorbo. Noona dice que somos de mucha ayuda. Ella ya esta vieja y arrugada y así nos cuida, así que yo y mis amigos tratamos de no dar problemas. Aunque fallamos en esa cuida.

La señorita Ahn iba a tomar el té en su jardín trasero y Noona nos pidió que le ayudáramos a llevar las cosas, así que tomamos los postres yo y JiMin, y Tae llevaría él te.

Al llegar pusimos los postres en la mesa y Tae iba a poner el té, pero se tropezó con la pata de una silla provocando que él se te le callera en el cuerpo de la señorita Ahn.

Se levantó histérica gritándole cosas a Tae, solo tenía 8 años se supone que debía comprenderlo. Ella golpeo a Tae en la cara, JiMin se escondió tras mío y yo iba a correr a defenderá TaeHyung, pero Noona me detuvo me sonrío y se dirigió a esa bruja.

-Señorita Ahn por favor perdónelo es solo un niño-dijo Noona poniéndose enfrente de TaeHyung para parar los golpes. Yo y JiMin fuimos por TaeHyung quien lloraba silenciosamente.

-¡Es un niño estúpido!-grito.

-Perdóneme señorita-hizo una reverencia de 90°.

-Descontare esto de tu sueldo-sin más que decir se fue hacia la grande mansión.

Noona se dirigió a nosotros y cargo a TaeHyung aun con la sonrisa en su rostro y lo llevo al cuarto donde nos quedábamos para ponerle una pomada.

Se lo que piensan, podríamos avernos ido lejos, pero no, no podemos Noona tiene una deuda con esa bruja y no podemos irnos hasta que acabe de pagar, la verdad Noona nunca me dijo que era, pero sé que con nosotros tres ahí seguía aumentando más, éramos unos estorbos. Aun no comprendo porque Noona se quedó con nosotros tres, somos una carga. Talvez nos hubiera dejado donde nos encontró ahí para que nos muriéramos; de que servía estar aquí sí solo íbamos a sufrir.

Después de que Noona regresara al trabajo nos dirigimos silenciosamente al jardín trasero detrás de los rosales donde teníamos una salida secreta, salimos y nos dirigimos colina hacia abajo donde había un hermoso cerezo con una pequeña casita de madera que habíamos construido, la verdad TaeHyung la diseño, JiMin hizo los números y yo convencí al vendedor de madera que nos diera un descuento, poco a poco juntamos materiales para hacerlo más cómodo.

JiMin abrazaba a Tae porque este aún seguía llorando.

-Tranquilo Tae ya paso-dijo el rubio acariciando la cabellera castaña.

-Esa bruja es mala-dijo el castaño mientras hacia un puchero.

Yo miraba la escena, la verdad no era justo que viviéramos así.

-¿Así será siempre Chimchim? - pregunto el castaño.

JiMin se quedó en silencio y luego me miro en busca de ayuda.

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