Cap 3 - Parte 2

178 17 0
                                    

Una noticia que le tenía algo preocupado

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Una noticia que le tenía algo preocupado.

Una noticia que no lo dejó dormir por más de tres meses, llevando a su cargo aquel caso que hasta ese momento nunca pudo resolver. 

Bangchan siempre se preguntó qué había pasado para que sucediera. Que les llevó a cometer tal crimen tan horrendo en esos días. 

Pero también se preguntaba, con un café al lado de su escritorio y sus manos juntas debajo de su barbilla, cuál era el propósito de quemar un cuerpo que hasta entonces no aparecía ante sus ojos. Por lo que ante esa pregunta, solo suspiró para estirarse y recordar el porqué aún no salía a casa, y eso era el caso Kim.

Un caso que aún jefe Yang nunca quiso tocar de nuevo, sin caer en un trauma constante de no poder recordar lo vivido. Su padre, el general de la jefatura de Seul también se negaba a hacerlo recordar y a qué nadie le toque el tema sin que pudiera hacer eso. Pero cree que al contrario de ser mejor, ha resultado ser un bulto en el trasero.

Nadie se merecía negar que algo pasó.

Nadie se merecía negar que algo apestaba en ese caso detrás de la certera resolución que habían dado, dejándolo como un suicidio más antes de cerrarlo por completo. Sin embargo, ¿cómo alguien tan júbilo, de pronto va a tomar a tirarse a la piscina de aquella mansión? Esa era y sería una broma de mal gusto.

— ¡Yash! —exclamó antes de llamar la atención de uno de sus hombres, quien se detuvo a verlo con una sonrisa y un café helado en la mano. 

No tenía consciencia de que el comisario Bang se quedaría en representación de Jeongin, pero era una suerte que esté en ese lugar. 

Moonbin estaba feliz de que lo estuviera.

Su jefe de equipo era un renegón cuando se trataba del caso Lee, así que era mejor tenerlo en España atendiendo un caso de drogas, que verlo parloteando por el estado de ese hombre que sólo lo hacía perder el tiempo sin llegar a atraparlo. 

En fin, ¿acaso si había una pequeña y diminuta esperanza de hacerlo? Claro que no, su equipo siempre le decía que cambie la persecución irreverente, pero, no, nunca les hacía caso.

Moonbin: Vaya comisario, ¿trabajando en un caso tan tarde en la mañana sin el consentimiento de su mayor? ¿al menos ha desayunado Bang? 

Sonrió.

Moonbin: Los chicos del equipo de investigaciones siempre preguntan por usted y por el capitán Yang. Por cierto, es raro que no esté aquí, ¿fue a ver la sentencia en el caso de drogas en Madrid?

Preguntó con una sonrisa, sentándose a su lado para ver el papeleo regado por todo su escritorio, pero cuando intentó tomar alguno de esos papeles el sonido del refrigerio de estos comenzó a resonar en sus oídos deteniéndolos de golpe.

Bangchan: Vaya, creo que deberíamos salir 

Es lo que dijo como si nada, tomando todo de una vez para guardarlo. Después de todo, una comida era sagrada para sí mismo, y el hecho de que ya no tenía a su aprendiz de policía al lado era más que estresante.

Bangchan: dios, porqué debí de mandar a Jisung con él —suspiró— ahora estará matando del estrés a Jeongin

Moonbin: ¿Quiere ayuda en algo? —indagó al ver su preocupación, pasando una mano por el hombro de este. 

Una sonrisa y un movimiento de dedos. 

¿Qué era lo que estaba proponiendo? 

El mayor sólo rodó los ojos y apartó esas manos de su traje en cuanto se posaron en el, para mirar al frente como una camioneta se detenía ante ellos y una persona más que conocido para él no hacía más que bajar con aquellas vestiduras tan elegantes.

¿Qué es lo que hacía Changbin ahí? 

Moonbin: ¿Jefe?

Bangchan: No soy tu jefe Moonbin, Jeongin lo es. Disculpa, debo dejarte, tengo asuntos que arreglar. Anda toma algo con... —comenzó a buscar con la mirada a alguien con el cual emparejar a aquel hombre. 

Y no es que no le gustaran los chicos, bueno, no le gustan. Pero si le llegara a gustar uno, no sería 'ese chico'. Tal vez sus gustos estaban casi como aquel hombre frente a él. Fuertes y serios.

No. ¿pero qué decía? Pues quién se imaginaria que alguien como él, le gustaran más fuertes que su persona. Nadie, absolutamente nadie ni su propio mejor amigo, como lo era Yang Jeongin lo sabía.

[...]

Bangchan: Vaya, que raro verte por acá —fue lo que pronunció, saliendo de aquella patrulla luego de haberse deshecho de aquel chico que quedaba viéndolo detrás de esa puerta con los labios apretados.

Changbin: Raro te diría yo, ¿de cuándo acá das la bienvenida a tu peor enemigo? —rió acomodando su saco— creí que eras el perro guardian de Yang Jeongin, ¿dónde está?

Bangchan: Vaya —rió acercándose un poco más, siendo vistos de lejos por alguien más— pero que gracia, si siempre pensé que sería mi jefe el que te preguntaría eso algún día, ¿por qué tanto apuro en saber sobre él?

Changbin: Mh —miró a todos lados ya un poco serio sabiendo que algo había mal en ese día tan tranquilo para ambos— en realidad si tengo algo que decirte y quería hablar con tu jefe, pero tú me sirves de mucho

Bangchan: Te escucho —respondió, ya más que integrado que en un principio.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 03, 2023 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

MR. LEE [MINJEONG]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora