A.

2.2K 119 207
                                    

Altocalcifilia.
El objeto del deseo son los zapatos de tacón alto.

▪️◾▪️◾▪️◾▪️◾▪️◾▪️◾▪️◾▪️◾▪️

Estaba fascinado nada más verlo. Y aunque sabia que su mirada sobre aquel atractivo joven podia ser espeluznante, aún asi, no la apartó. Como sus pies se movían al compás de la música, el movimiento hipnotizante de caderas dentro de unppantalon blanco pegado a su trasero. Su piel pálida contrastando con el color negro de su croptop, resplandeciente entre los colores neón del lugar.

Zayn Malik, fiscal privado de la policía de Nueva York, tomaba de su brandy sin prestar atención a la conversación que sus compañeros de trabajo tenían.

Después del caso Brennan, los agentes le invitaron a una copa, y ahora, ahí se encontraba tan excitado por un par de piernas hermosas. Jamás se consideró un hombre gay, pero en ese momento, él no podía evitar imaginar a ese chico usando sus extremidades inferiores para rodear su cintura mientras él se encargaba de embestirlo sobre su cama.

-Llevas toda la noche mirandolo. Invitale un trago.

Harry Styles, teniente de la policía le sonrio, en su mano derecha sostenía una botella de cerveza, mientras que a su lado izquierdo su esposo; Louis Styles charlaba con Niall Horan.

-¿Debería?-aunque no dudaba, esta vez se encontró preguntando si estaría bien.

-Es lo primero si lo que quieres es una buena charla con ese sexy muñeco.

Styles tosio cuando recibió un fuerte codazo de su pareja. Louis no era un tipo tranquilo a decir verdad. Era celoso y posesivo, y Harry Styles un tipo muy coqueto. Mala combinación si preguntaban a Malik.

-Ya ve a invitarle una puta copa para que este imbecil deje de ver su culo-escupio Tomlinson.

Malik rio ronco cuando observo la escena a su lado. Harry intentando meterle mano a Louis para contentarlo, y a este intentando quitarselo de encima.

Mientras tanto. En la pista central, Liam Payne bailaba sin inhibiciones en medio de sus amigos. Sonriendo con coquetería, pasando sus manos por sus costados. Sabiendo que el sexy hombre del fondo le miraba. Sentía su ardiente mirada sobre su acalorado cuerpo.

Excitado de solo imaginar lo que ese desconocido podia hacerle a su cuerpo. La infinidad de placeres que podía proporcionar solo con esos dedos ásperos que se cerraban alrededor del cristal entre ellos. Las venas marcadas en el dorso y algunos tatuajes que se podían apreciar por las mangas dobladas hasta la mitad.

Lo habia visto entrar, llegando al área VIP con los demás tipos, pidiendo un suave brandy cada treinta minutos y entretenerse al ver como Liam bailaba. Disimuladamente supo que no estaba prestando atención a la conversación que se llevaban los demás.

Y cuando por fin sus ojos se encontraron a través de la multitud y las luces, Liam tuvo el descaro se sonreír, pasando su lengua por su labio inferior y guiñarle un ojo. No admitiría que la intensidad con la que lo analizo de pies a cabeza no lo estremeció, volviendo sus piernas gelatina. Sintio un cosquilleo en su bajo vientre. Interesado en lo que la profundidad de esos ojos profesaba.

Lo vio dejar el brandy sobre la mesa de cristal en el centro. Solo bastó una mirada mad, una lengua juguetona entre labios, para que el hombre se acercara hasta él. Se estremeció ligeramente cuando sintió a su espalda el calor que desprendía el amplio pecho del desconocido. Sus manos grandes y calientes en sus caderas, ayudándole a moverse. El castaño llevó sus manos a las contrarias, acariciando sensualmente.

Se miraron de reojo, él sintiendo el aliento a brandy sobre su suave mejilla. No sé necesitaron palabras en ese momento. Solo bastó que moviera su pelvis y su trasero golpeara en el miembro semierecto. Sus labios se separaron apenas un poco, gimiendo bajo por su acción.

A- E- I- O- UDonde viven las historias. Descúbrelo ahora