𝑨𝒄𝒕𝒐 𝑽𝑰

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Me agarro de la columna de la entrada de liyue y respiro muy profundo viendo el puente que había frente a mi

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Me agarro de la columna de la entrada de liyue y respiro muy profundo viendo el puente que había frente a mi.

— Estoy en casa.— camino adelante. Mantengo mis energías para más tarde, tenía pensado tener una conversación con alguien. Lo veo a lo lejos sentando en una mesa tomando té después de unos minutos caminando— ¡Zhongli!

No gira a verme, en cambio su profunda voz me inunda el oído.

— Haz vuelto. Más temprano de lo que esperé.— deja la taza en la mesa.

— Creo que hay  cosas que debes decirme, Zhongli.— me siento y pongo las manos en la mesa.

— ¿Qué es exactamente lo que quieres saber?— abre los ojos y me observa.  Tenía muchas preguntas con respecto a una persona y las voy a obtener.

— ¿Quién es xiao exactamente y por qué sabes tanto de él?— su rostro cambia a uno serio y trago de repente. Akim se encontraba atrás de mi tratando de mantener silencio y observando todo.

— No pensé que te interesará otra persona que no seas tú. Xiao al igual que tú tiene un inmenso poder, pero a la vez puede ser corrompido por emociones que contaminan el alma.— miro mis manos y zhongli parece mantener su compostura. Tal vez zhongli quería que entendiera que había gente parecida a mi.

— Quiero saber más sobre xiao.— una sonrisa aparece en los labios de zhongli.— Esto es lo que haz querido todo este tiempo, ¿No?

— Nunca dije algo como eso. Sólo quería saber cuál decisión ibas a tomar tú. Me sorprende que los giros hayan sido distintos.

— Deja de jugar conmigo y ve al grano.— pongo mi cabeza sobre mi mano apoyada de la mesa.

Toma un poco de aire y luego lo suelta. Hace contacto con la taza de té frente a él. Creando círculos arriba de ella. Luego me mira, casi como si estuviera procesando que decir. Después de lo que parecen minutos finalmente se aclara la garganta y  hace contacto visual.

— En el pasado, Xiao fue esclavizado por un arconte malvado, y sufrió inmensamente bajo su tiranía, hasta que finalmente recuperó su libertad. Xiao demostró tener las habilidades adecuadas, demostró que podía masacrar los demonios sin ningún tipo de duda y suma facilidad.— zhongli trata de seguir,  pero se detiene.

— ¿Qué tipo de persona era antes de ser esclavizado?— muerdo mi labio y cierro mis puños debajo de la mesa.

— Aquel tiempo en el que servía a su amo solo hizo qué xiao perdiera poco a poco su inocencia y amabilidad. Lo único que le quedaba eran sus habilidades para asesinar.— me quedo en shock, aunque nadie lo notara mis manos comenzaron a temblar, y mi cabeza era un lío.— Después de todo ha vivido miles de años en soledad.

—¿Erin?— la voz dulce de Akim me hace cosquillas en el oído y pego un brinco en la silla cuando me toca el hombro.

— ¿Debería seguir?— zhongli me mira preocupado, aunque no se notara en su rostro.

SilenceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora