𝐋𝐮𝐧𝐚 𝐧𝐮𝐞𝐯𝐚☪

Somos tan dañinos

Me detuve al mirar a Leah hablando con los vampiros, ella se miraba algo preocupada y ellos tensos. Maldición esa niña quiere morir!

Saque mi cuchillo lista para atacar pero Leah empezó a caminar guiando a el trío de vampiros, suspiré rendida, ella no tiene remedio. Observé a los vampiros y mis ojos se detuvieron en el idiota más alto, tengo una sensación de asco, su olor es tan penetrante.

Sacudí mi cabeza y me detuve al ver que Leah les mostraba la vieja cabaña. Claro la antigua casa, no es tan tonta como pensé.

Mientras entraban a la casa, fui a sentarme abajo de un árbol. Cerré mis ojos concentrándome en mí olfato, hiervas, algodón, vendas y sangre.
Así que los va a curar, vaya que si es igual de compasiva que su madre pero eso mismo la llevó a su muerte. Está mocosa ¿acaso cree que todos son igual de amables que ella?¿No sabe como son todos los malditos vampiros? Repulsivos, mentirosos, hipócritas y sobre todo unos traidores...

Apreté mi cuchillo sintiendo dolor y enojo. Son todos igual de horrendos, suspiré tratando de borrar mis pensamientos hacia la madre de Leah.
Fruncí mi ceño y me levanté caminando hacia la cabaña, no dejaré que lastimen de nuevo a mis hermanos y con ese pensamiento abrí de golpe la puerta de la cabaña.

Miré de reojo como la licántropa llamada Leah me vendaba delicadamente la herida del brazo cuando la puerta se abrió con fuerza que todos brincamos del susto. Otra licántropa entro caminando directamente hacía nosotros y me tomó del cuello con demasiada fuerza que casi me levantaba del suelo. Sentí como Wendy y Jace se ponían alerta para pelear aún estando lastimados.

Mire a mi hermana y tragué saliva. Ay no...

¡Karma! ¡detente!

No lo lastimes...

Dije asustada y me acerqué a ella.

¿Qué quieren aquí?

Escuche a Karma preguntarle mientras apretaba más su agarre en el cuello de Josh, miré como este se empezaba a poner morado de la fuerza. Mi cuerpo empezó a temblar y corrí rápidamente a abrazarla- Karma detente por favor!-Dije poniéndome a llorar.

Desvíe mi mirada de el vampiro hacía Leah, la miré confundida por sus acciones, espera no me digas que ella... Maldición pensé mientras soltaba al vampiro y escaneada el cuerpo de Leah buscando alguna herida- Deja de llorar ya niña tonta.

Me acerqué a Josh revisando su cuello, tiene unas marcas pero se le quitaran, nada grave. Suspiré manteniendo la calma y miré a la licántropa.

Solo pasábamos por aquí, no veníamos a hacerles dañó.

Miré al vampiro más alto y sentí una sensación tan rara... como si mi cuerpo fuera a colapsar ahora mismo, apreté la mano de Leah inconscientemente y gruñí un poco. Sentí como Leah estaba nerviosa-hablemos afuera Karma- Sacudí un poco mi cabeza y asentí saliendo de la cabaña con Leah.

Me detuve cuando estuvimos lo suficientemente lejos para que no escucharán nuestra conversación y miré a Leah con una ceja alzada.

¿Y bien? ¿Qué tienes que decir sobre tu maldita despreocupación ante esos estúpidos vampiros? Pudieron hacerte algo-dije mientras sujetaba sus hombros.

Karma yo no quería...-Dije sintiendo mis lágrimas volver a salir-De verdad quería que ellos se fueran pero- baje mi mirada y apreté su blusa- mi predestinado es un...-Llore más fuerte y abrace a Karma buscando confort-De verdad lo siento, pero no puedo soportar verlo así, me siento rara, siento su dolor...

Miré a Leah llorar y suspiré, todo va de mal en peor- Cálmate mocosa...

karma por favor no hagas que se vayan si se va yo...

Leah cálmate-Limpie sus lágrimas- Ésta bien, si eso es lo que te hace sentir mejor, pero no se pueden quedar aquí, los llevaremos a la casa grande si?-Dije viendo como se tranquilizaba.

Gracias Karma

Asentí ante su respuesta-Pero primero házme un favor. Debes ir por Jacob y llevarlo a la casa grande, yo me encargaré de los vampiros, iremos por el subterráneo, será más seguro.

Entonces me adelantó hermana.

Bien, ve con Jacob-Mire como se empezaba alejar.

Les dije que no era buena idea, seguro están planeando encarcelarnos.

Ahora que están distraídas hablando deberíamos escapar.

¡Chicos!-Levante la voz haciendo que los dos me miren.

¿Qué pasa Josh?

Apreté mis puños enojado y miré a Jace-Ella nos ofreció su ayuda e incluso se tomó el tiempo para curar nuestras heridas y ¿así es como le quieren pagar su amabilidad? No puedo creer que sean así.

Josh escucha, puede solo estar fingiendo para ganar nuestra confianza.

Miré a Wendy-Como ya lo dije, nos curó y nos dejó quedarnos unos días en su casa, incluso detuvo a su amiga que casi me mata, que por cierto, ustedes no hicieron nada por ayudarme, que clase de hermanos son.

Josh no entiendo porque te estás alterando demasiado, pero sabes que lo mejor es irnos.

No Jace!-Los miré decidido-No nos iremos, yo no me quiero ir...