Pinté óleo sobre la mesa,
los aceites revoloteaban sobre el lienzo,
ardua faena de pensamiento.Calidez en un pincel,
me expresé sin querer.Ahí estabas tú,
reflejada en el hecho,
acurrucada en un manto,
diluyendo el sentimiento.Partiste en segundos,
tu recuerdo aun no está seco,
camino sobre bordes,
aún hiere el sentimiento.Colores y más colores,
historias en blanco y negro,
la última fue la nuestra,
triste y desierta.