Verdaderamente tuyo

Cuento 8

Cuento 8

¡Despedida del Duque, Por favor No Vuelva!

''Mi nombre es Sabrina, ¡Encantada de conocerte!''

''Yo... yo soy L-luella... e-encantada de conocerte.''

''¡Estoy feliz de no estar sola más tiempo! ¡Oh las penurias por las que he pasado!'' Sabrina dijo de forma melancólica.

''Estás exagerando.'' (Adelina)

''¡No, definitivamente no! ¿No sabe cuan problemática puede ser Duquesa? ¡Puedo sentir mi cabello disminuyendo cada día por ti!'' (Sabrina)

Adelina simplemente rio.

Luella estaba impresionada de ver su interacción, ambas parecían ser buenas amigas y no subordinada-empleada.

¿Algún día ella podría ser así de cercana con la Duquesa?

''¿Deberíamos tomar té en el jardín?'' Adelina propuso.

Ambas estaban asintiendo fervientemente.

Cuando el Duque oyó que su esposa estaba teniendo té en el jardín, él inmediatamente dejó sus documentos en la mesa y salió de su oficina apurado por unirse a su esposa.

El Duque iría al campo de batalla en tres meses así que la Duquesa se quedaría en la capital para despedirlo a la guerra. El Duque estaba inseguro de cuanto él pasará peleando en el campo de batalla así que él quería pasar esos tres meses con ella.

''No.'' (Adelina)

''¿Qué quieres decir con no?'' (Niklaus)

''Estoy teniendo té con mis amigas. ¿Por qué te estás entrometiendo? Arruinas la diversión.'' (Adelina)

''...'' Niklaus estaba sin palabras.

Nunca en su vida lo habían rechazado de esa manera.

¿No todo el mundo trataba lo mejor que podía para ser capaces de tomar el té con él?

Pero ahora, su esposa estaba echándole para tomar té con sus Damas de Honor.

¿El mundo se había vuelto loco?

''Duquesa, está bien. Debería pasar su preciosa tarde con el Duque.'' (Sabrina)

''S-sí Duquesa. E-e-es una agradable tarde así que us-usted debería disfrutarla con el Duque.'' Luella añadió nerviosamente.

Viendo los expectantes ojos del Duque, Adelina solo pudo respirar pesadamente y decir, ''Bien, puedes unirte.''

''E-entonces nosotras no-nos retiramos.'' (Luella)

''¿Qué? ¿Por qué se irían? El es un invitado sin invitación, no tienen porque ponerse tímidas a su alrededor. Quédense y continuemos nuestra conversación.'' Adelina paró a Sabrina y Luella.

¡¿Invitado sin invitación?! ¡¿El Duque?!

Ambas estaban mudas, asustadas de que el Duque recriminará a la Duquesa por sus rudas palabras. Pero, para su sorpresa, el Duque seguía sonriendo brillantemente.

''Su té se esta enfriando, permítame servirle otra taza.'' Niklaus ofreció a su esposa.

''Bien'' Adelina alzó y bajó sus hombros.

''¿El Duque servirá el té?'' Sabrina preguntó en shock.

''Por supuesto, él no es tan inútil como para no poder hacer algo tan simple, ¿no es así?'' (Adelina)