ＧＲＯＷＮ ＵＰ 🍒｡•.♡ ᴊᴀʏᴡᴏɴ

he's not the only one

Luego de presenciar aquella escena tan horrible ante sus ojos, JungWon fingió no haber visto nada, trató de hablar normalmente con Jay, pero a la salida le pidió a su amigo SunWoo que por favor lo dejara ir a su casa.

Y allí estaba él, llorando desconsoladamente sobre la cama del mayor.

— Está bien, te entiendo JungWonnie.— el rubio acariciaba la espalda de su amigo, sintiéndose mal por él.

— Realmente creí que tenía alguna oportunidad con él... Me siento tan tonto hyung.— limpiaba sus lágrimas sin poder parar de llorar.

— Está bien JungWonnie, a veces las cosas son así... Pero estarás bien, eres pequeño, seguramente te gusta alguien más también.

Y JungWon pensó y pensó.
No había nadie que le gustara tanto como Jay... Pero al recordar esa vez en dónde aquél chico Haruto se le medio-declaró, lo hacía sentir un poco bien. Haruto si le gustaba un poco, era muy atractivo, y alto, y su voz le erizaba la piel.

— Me gusta un poco Haruto.— contestó aún limpiando sus lágrimas.

— ¿Lo ves? No es el fin del mundo, muchos chicos más te gustarán, Jay hyung no es el único chico en la tierra.

Y JungWon asintió. Definitivamente, Jay no era el único chico en el mundo, y JungWon no podía depender de él, de su cariño, o de sus mínimas posibilidades de salir con él.
Era un adolescente medianamente guapo, simpático y agradable, podría salir con quién quisiera, no necesitaba a Jay en todo.

Limpió sus lágrimas y respiró profundamente, tranquilizandose.

— Tienes razón hyung... ¿Qué importa con quién salga él? Yo también puedo salir con quien yo quiera.

Y SunWoo lo miró, preocupado.
Quizás le había dicho las palabras equivocadas.
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Ese día entró a la escuela solo, había llamado a Jay temprano para decirle que no lo buscara en su casa pues quería tener tiempo para él.
Al ver a sus amigos, les sonrió, y ellos le hubieran devuelto la sonrisa si no hubieran visto su cabello castaño claro.

— ¿Cuándo teñiste tu cabello? Te ves genial JungWon-ah.— lo halagaba HeeSeung.

— Es verdad, a mí el cabello castaño no me quedaba para nada bien.— se quejaba SungHoon.

JungWon miró a Jay, quien lo miraba de arriba a abajo.

— ¿Acaso eso es un piercing, JungWon-ah?— Jake señaló su oreja, emocionado.

— Oh, si, me lo hice hace dos días, así que aún duele.— sonrió.

La campana sonó y cada alumno debió dirigirse a su respectivo salón. Cómo siempre, Jay se ofreció a acompañar a Yang, y éste aceptó.

— Oye, JungWon.— habló abrazando al menor por los hombros— ¿Sabes que eres lindo, verdad? Siempre te ves adorable, pero ahora especialmente, con todo éste cambio, te ves particularmente atractivo... Te ves guapo, muy guapo.

No lindo, ni adorable.
Guapo. Jay lo había llamado guapo.

Sonrió con algo de vergüenza, pero se negó a aceptar su halago.

"Tu nueva novia no es tan atractiva ¿O sí?..." se cuestionó mentalmente.

— Gracias hyung, quería cambiar un poco de estilo.

— De verás JungWon-ah... Te ves demasiado atractivo.— con la mano que estaba sobre el hombro del menor, acarició su mejilla y cuello, con cariño.

JungWon se sintió temblar.

— ¡Oye!— ambos escucharon una voz grave proveniente de la clase continúa a la de JungWon— Disculpa, JungWon...

Haruto estaba allí, parado con un rubor en sus mejillas y una sonrisa avergonzada.

— Oh, espera hyung.— le dijo JugWon a Jay mientras corría hacia el más alto.

Y no, no le dijo que se vaya, le dijo que lo espere, así se quedaría a ver cómo JungWon también hablaba con otros chicos.

— Siento ser tan molesto, quería decirte una... Más bien, dos cosas.— sonrió mirándolo a los ojos— Primero, que te ves muy... Hermoso, tu nuevo color de pelo y tú pendiente se te ven... Simplemente fantástico.— lo elogió, y JungWon se sintió sonrojar— Y segundo, uh... Me diste mal tu número...— sonrió ésta vez apenado— Si lo hiciste a propósito, lo entiendo, dime si realmente no quieres que te hable o...—

— ¡No, claro que no! Si... Si quiero hablarte...— otra vez se encontraba sonrojado hasta las orejas— Uh... No te lo dije, pero tú también me pareces lindo.

Y Jay escuchó cada una de las cosas que se decían.

— Genial, uh...— Haruto se sentía aún más avergonzado— ¿Sabes? Tenía pensado salir por un helado luego de la escuela...— rascó su nuca.

JungWon sonrió.

— ¿Eso es una invitación, Haruto-ssi?— sonrió adorablemente mientras lo miraba a los ojos.

— Puede ser, JungWon-ssi.— le sonrió coqueto, acercándose al más pequeño.

Yang rió, tímido. Asintió con la cabeza y le sonrió.

— Te esperaré a la salida de la escuela.— se dió media vuelta y miró al mayor, quien se encontraba disgustado— Adiós hyung, nos vemos en el receso.— le sonrió con desinterés y entró a su clase.