Ha pasado menos de un día desde que el cuerpo fue hallado en el campo deportivo de la universidad. A pesar de eso, estas noticias como si llevaran alas ha recorrido por casi todo el pueblo; propagándose más rápido que una enfermedad, ya sea si es un político o un recluido, todos los pobladores de Dominen hablaban de este hecho.
Dominen era un pueblo perdida para las otras sociedades, pocos sabían de la existencia de este lugar, pues no aparecía en ningún mapa y muchos menos en las búsquedas de algún GPS, se encontraba ubicado alrededor de varias montañas altas y un rio separaba en dos al pueblo, la flora y la fauna abundaba en este lugar y no era raro ver a vicuñas o conejos silvestres rondando por las avenidas, los ciudadanos eran temerosos al recibir lo desconocido, por ello pocos eran capaces de salir y hacer una vida nueva fuera de Dominen, para ellos su único medio de comunicación a las afueras del pueblo era un hombre de mayoría de edad, poco se sabía la edad de este señor, pero él era el sabio y el espectador de todos los sucesos de Dominen.
La gran noticia conmocionó a todos y provocó que muchos de las personas se reunieron y entre ellos empezaban a rumorar de los posibles culpables de aquella trágica muerte.
—¿Ha muerto? ¿Quién la pudo haber matado?
—Quién otro más pudo haber sido, seguro fue el chico con el que andaba últimamente, se veía tan inocente que no sabíamos que tramaba algo tan macabro.
—Debo decirlo, actuó bien, nos engañó a todos.
—¡Así es!, se veía tan frágil, yo creo que ya lo tenía calculado todo desde un inicio.
—Dice que encontraron la gorra con el que él siempre andaba en la escena del crimen.
—Pero ¿Cómo pudo hacer algo así? A ese muchachito no le ha importado crear un dolor y una tormenta grande al padre de la doncella, seguro que el señor se siente destruido y desamparado, después de todo ella era su única familia, ella era lo único que le quedaba después de ese accidente donde murió su esposa.
— Él dijo que cuidaría de su hija de todo el peligro; pero mira nada más, ese joven acabo con su más preciado tesoro.
— ¿De dónde sacaron ese rumor tan absurdo? — interrumpió un señor de un aspecto tenebroso, vestía de negro, tenía puesta una gorra y una mascarilla, casi no se le notaba el rostro era aquel viejo que todos consideraban "el sabio" — De hecho, esa gorra no fue de ese muchachito, ¿no creen que sería raro? porque si es que lo hubiese calculado desde el inicio, no dejaría ninguna prueba como evidencia en la escena del crimen, además un contacto que está ayudando en la investigación de este caso dice que ella no fue asesinada por ese joven, existen pruebas que hace suponer que puede que haya sido su ...
— ¡Realmente ridículo! — interrumpió con coraje un chiquillo que decía ser muy cercano a quien ahora era solo un montón de carne— Tan solo mira, ¿Dónde está? Ni siquiera su alma se acercó, él es el verdadero culpable, ahora entiendo por qué solo usaba gafas oscuras y una gorra, no estaba enfermo, solo quería cubrir su rostro para que nadie viera como era, lo peor fue que nosotros caímos en su mentira ¿Débil?, que estúpido — estrujó su puño y se dio un fuerte golpe en el pecho echando lágrimas dijo — El paraíso tiene tantas puertas como el infierno, y yo deje que él abriera la puerta del infierno para ella.
Después de su muerte, pasó una semana para que ese tema se diera por cerrado, tal como un ataúd y el misterio de esa muerte fue resuelta con una simple conclusión, afirmaron ciertos actos que se rumoreaba de los posibles sospechosos; pero no sé halló al verdadero culpable. Hubo una reunión general en ese pequeño pueblo, que cuando quiera que se halle una pequeña duda entre el familiar e incluso los ciudadanos, este era inmediatamente suprimido.
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Unas Palabras desesperadas
Misterio / SuspensoEl silencio nunca fue una opción, fue un privilegio; un mundo donde el deseo de la desesperación de gritar, llorar y confiar solo existía en el sueño de algún loco o al menos eso es lo que pensaba un joven.