Hit Man

2. Málaga (Antequera)

Laurel 

Después de que llegué de "La Cantina" anoche no hice nada mas que acostarme, todo el Martini que bebí me tenia con dolor de cabeza y no es que no estoy acostumbrada a beber tanto y más Martini es que estaba bebiendo sin parar.

Consejo: No beban excesivamente si no se han echado nada al estómago.

Algo de que me di cuenta anoche y que por una razón llamada "exceso de bebida sin comer nada" no le di tanta importancia y es que mientras conversaba con Matías el le hacia señas y muecas raras a Daniel.

Algo me dice que el cantinerito este tiene algo raro.

-Buenos días- Le hable al chico que esta todo despeinado y con cara de amargado en la sala.

-El nombre de la tercera chica es Rebeca y lo que tiene son 12 años su madre la vendió cuando tenia 5 años, tiene una vida muy traumatizante, violada, ya ha tenido contacto con las drogas.

-Pensé que tenía 17 o 18- Lo interrumpí y al mismo momento ignorando que el no me dio los buenos días.

-El exceso del maquillaje las hace verse de mas edad, pero todas esas niñas que trabajan en ese lugar tienen el mismo caso que Rebeca o quizás peor- Respondió.

Pero ¿Quién las compra? Es la pregunta que da vuelta por toda mi cabeza.

El Cantinerito no es, el dinero que se gana no le alcanza para comprar niñas en 30 millones y a veces hasta más.

-¿Sabes como es que llegan a trabajar en un lugar así tan reconocido?- Pregunte después de pasar unos minutos sin decir nada.

-El lugar esta a nombre de Matías, pero quien en realidad hace todos los transmites de las menores de edad y las drogas es Daniel- Respondió Sebastián quien ya se estaba parando del sofá- Rebeca es una de las hijas de el- Concluyo haciendo que con esto ultimo cerrara las manos en forma de puño.

-Es un hijo de puta- Dije apretando aún más el puño.

Tomare una ducha para poder relajarme e ir de compras, necesito ir de compras para poder estar completamente relajada, para estar en modo paz.

Sebas se fue hace rato, como de costumbre ya ni me dan ganas de matarlo cuando sale sin avisarme.

Mi mañana empezó con mucho dolor de cabeza y mas dolor me dio cuando sebas me hablo de ese desgraciado, nada que un buen baño y un Whisky no resuelvan.

-...

-¡¡ME ENCANTA!!- Grite eufóricamente mientras sostenía en mis manos un hermoso vestido descotado, color rojo vino, con unas mangas transparentes y una forma bellísima de sirena.

Me he enamorado de este vestido, por su forma y color, allá en casa tengo montones con formas diferentes, pero a mi armario le hacia falta uno como este.

Oh por Dios, ya no puedo resistir más, me dirigí al vestidor y estoy que no puedo con tanta emoción.

Sali del vestidor con aquel hermoso vestido puesto para mirarme en el espejo y ¡¡WOW!! Amo como me queda, amo como me deja las curvas marcadas, es perfecto.

-A este hermoso vestido le hace falta unas zapatillas y accesorios- Dije mientras aún seguía mirándome en el espejo.

Entiendo porque muchas mujeres me envidian y no las culpo si yo fuera otra persona también me tendría envidia.

Pagué el vestido y me dirigí a una tienda de zapatos que se encontraba al lado, son todas unas bellezas.

De tantas opciones de zapatos no supe por cual elegir y tome 5 pares de zapatillas, ya cuando llegue la hora de ponerme la majestuosidad de mi vestido buscare de las zapatillas que más me han encantado.