slightly introverted ➵ ʙᴛs;; jjk [✔]

O2O

—Mamá, ¡Él está aquí y no se quiere marchar! Es demasiado molesto.

—¿Desde cuando te molesta que JungKookie este en casa? Amabas que se quede contigo viendo películas.

—Eso era antes, ya crecí, y no quiero que este en mi casa. ¡Llámalo y dile que se vaya!

—Lo siento, cariño. Pero no me gustaría que te pase algo estando sola, solo no le hables, quédate en tu habitación. —a YeoJi comenzaba a disgustarle cada cosa— Cuidate, llegaremos más tarde. Adiós.

—Adiós. —con un suspiró escuchándose, colgó la llamada, volviendo a sus espaldas, donde el joven castaño sonreía de cada lado, sosteniendo un juego de llaves en sus dedos— ¿Feliz? —su amigo se había ido tras las insistencia de él, dejándolos a ambos solos.

—¿Por qué querías que este aquí? ¿No sabes lo peligroso que es para una chica estar sola en su casa con otro chico?

—¿Y tú qué eres, imbecil? —caminó hacía las escaleras, subiéndolas sin darle atención.

—Es diferente. —aseguró, siguiéndola.

Ya se estaba acostumbrando a seguirla de atrás, solo viendo su espalda al aceptar su evidente rechazo. YeoJi cambió, no era la misma niña inocente que lo escuchaba ante todo. Cuando ingresó a su cuarto, y tuvo la intención de cerrar la puerta tras ella, colocó su pie antes de eso, para así entrar rápidamente. Im chilló molesta, dejándose caer sobre su cama.

Se sentó en la punta de esta, tomando el control remoto para encender la televisión de tamaño mediano, al instante la pantalla se encendió y en esta se mostró la escena final de Iron Man. Con una exclamación saliendo de sus labios, JungKook giró su cabeza hacia la chica.

—¡¿La estaban viendo juntos?!

Iron Man era sagrado entre ellos.

—Tal vez...

—¡Eso es traición!

—Eres el menos indicado para hablar de traición, Jeon JungKook. —mierda, le había cerrado la boca— ¿Acaso tienes mala memoria que no recuerdas los días que pasaron?

—Lo siento.—salió rápido de él— Lo siento tanto, YeoJi.