3.- Un Rayo de Luz

10 2 0
                                    

Es impresionante como en tan solo segundos una persona puede llegar a desordenar tu vida, tu rutina, todo...

10 de Enero de 2019.

Y en ese momento agradecí haber traído algo cómodo y calientito.

El día estába frío y el cielo estaba decorado con nubes grises, daban indicios de que más tarde lloveria o posiblemente en cuestión de minutos.

A unas cuentas cuadras encontramos a un señor y se ofreció a llevarnos en su taxi, nosotras accedimos y subimos, dentro del taxi estaba calientito.

Mi mirada se perdió en las personas que traían abrigos gruesos, bufandas, guantes, gorros y algunos niños jugando.

Los días nublados para mí eran los mejores, pues te quedas todo el día en casa, acostada en tu cama y ya. Pero también no me gustan porque pienso en aquellos perros callejeros que no tiene dónde quedarse cuando esta lloviendo o hace mucho frío.

Recargue mi cabeza en la ventana y crucé mis brazos.

Mire de reojo a Jana que veía su celular con desesperación y mucha emoción. Después de unos minutos el taxi se detuvo. Jana se bajó y yo también hice lo mismo, caminamos unos cuentos metros y por fin llegamos.

Había un poco más de personas, Jana se quedó quita y su sonrisa se agrandó.

—¿Está aquí?

Pregunté mirando a mi mejor amiga, Jana asintió sonriente mirando a un punto.

—Bien, ahora dime ¿Quién es?

Jana señaló con si dedo índice, yo mire a un chico de más o menos 30 años, tenía lentes y llevaba un portafolio en su mano derecha, en la izquierda sostenía un vaso con café y llevaba un traje, era muy elegante, venía en dirección nuestra, frunci el ceño e hice una mueca de desagrado. El chico paso por mi lado y yo me voltee para poder observarlo.

—¡Dios! Pero que malos gustos tienes, Jana.

Jana río y me tomó de los hombros.

—No seas idiota, Maia, el no es.

Me giro, se puso atrás de mi y pasó su mano encima de mi hombro preparada para señalar.

—Es el...

Es el...

Sus palabras fueron desapareciendo poco a poco, ella apuntó a la dirección donde supuestamente se encontraba el chico, yo mire.

Un rayo de luz cayó a dirección donde Jana señaló, baje la mirada y lo ví, era como si el cielo me lo estuviera presentando, como si hubiera mandado a uno de sus ángeles.

El rayo iluminaba su cabello, el entrecerro los ojos por qué el sol le molestaba. En ese momento todo sucedía en cámara lenta.

Esto parecía de película, mi respiración se cortó, mi corazón comenzó a latir como loco y un cosquilleo recorrío todo mi cuerpo ¿Qué es todo ésto?

Una sonrisa de escapó de mis labios, no lo pude controlar, simplemente salió.

Y sin aún yo estar lista, el me miró, fue muy rápido, sus ojos me escanearon un poco, no le pareci interesante y quitó la mirada, como si fuera una persona en el mundo, solo eso.

¿Por qué dolió? Baje la mirada y volví a la realidad.

—Lindo ¿No?

Escuché a Jana decir detrás de mi, yo me volteé a mirarla y fingi una sonrisa.

Una Coleccionista De Recuerdos [Progresó] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora