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Pov.Narrador/ra

—¿Japón? Soy yo México... Mira no tengo mucho tiempo así que iré al grano ¿USA está contigo?... ... Dime qué no está con él, por favor dime qué no está con... Chingada madre ¿por que dejaste que se fuera con China?.... ... ... ... ... ¡me vale si estabas cansado! ¡a China no lo quiero cerca de mi novio!... ¿que no le haya hecho nada? ¡¿crees que no le haya hecho nada?! ¡Japón estamos hablando de China! Ese a mi usita le hace de todo menos algo bueno... ¿Japón? ¡¿Japón?!.— le devolvió el teléfono al ruso —me cortó.

—pues con esos gritos cualquiera.— se quejó Russia —el pobre a de haber quedado sordo.

—... Si bueno ¿que te dijo Japón?.— pregunto el canadiense con curiosidad.

México soltó un bufido de molestia para luego cruzarse de brazos.

—me dijo que iba a llevar a USA a su casa pero estaba demaciado cansado, tanto que se caía del sueño; luego China se les acercó y le ofreció llevarlos a cada quien a su casa... Luego de eso no sabe que más pasó.— contó lo que le había dicho el chico gato.

—en conclusión; ¿China se secuestro a tu novio?.

—si le hizo algo lo mato.— gruñó México para luego hecharse a correr a la casa del asiático dejando solo a los otros dos countrys.

✨✨✨

China estaba sentado en uno de sus sillones individuales, en una de sus manos tenía una taza de té mientras que en la otra tenía un periódico, estaba tranquilamente leyendo las noticias del día cuando unos golpes en su cuerpo interrumpieron el pacífico silencio.

Soltó un pesado suspiro de molestia para luego levantarse de donde estaba sentado, dejo el periódico y la taza de té en una mesita para luego ir a ver quien era el que tocaba. Abrió la puerta dejando ver así a un muy enojado latino, este estaba a nada de preguntar por qué estaba ahí pero recibió un puñetazo en una de sus mejillas... "¡genial! Otro golpe para su hermosa cara".

—¡¿pero que carajo te pasa maldito tercermundista?!.— bramó el de ojos rasgados.

—¡¿en donde está USA?!.— México sólo ignoro las palabras del contrario —¡juro que si le hiciste algo-...!

—tranquilízate México, no le hice nada a la gorda capitalista... El no me lo permitió.— soltó un pesado suspiro al recordar la senda cachetada que le había dado el americano al intentar retirar la ropa de este y luego como lo corrió del cuarto encerrandose en el dejándolo así por fuera, el de tés roja le había tocado dormir en el incómodo sofá por eso.

—... — México le miro detalladamente notando así una leve marca «casi invisible» en una de las mejillas del chino, su novio se había defendido de este —bien... ¿en donde está mi USA?.

—no se.

—¿como que no sabes? ¡¿si estaba contigo no?!.

—si, "estaba" ya no. Se fue esta mañana, no se a donde y tampoco me importa, ya te dije lo que se así que largó.

Y sin más, el de estrellas amarillas cerro la puerta dejando a un confundido y preocupado mexicano fuera de la casa.

México empezó a caminar alejándose así de la casa del asiático, ya se estaba quedando sin ideas de donde estaría su pareja, el tiempo también se le acababa lo cual no hacía más que aumentar su preocupación.

—USA... ¿en donde estás?.

Continuara...

¡no mamen! ¡¿y USA?!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora