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Su dedo se deslizaba por la pequeña pantalla

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Su dedo se deslizaba por la pequeña pantalla.

- "Un dedo sin su dueño" - se detuvo.

- "El adolescente de 14 años Yang Jeongin" - levanto sus cejas.

- "Un meñique cortado lleno de sangre comenzando la etapa de putrefacción" - leyó para si mismo.

Ya no necesitaba seguir leyendo el articulo, sabia lo que seguía.

Minho suspiro, no sabia bien como sentirse al respecto, claro que no era la primera vez que sus acciones aparecían en un periódico pero esta vez fue rápido. Era un sentimiento extraño, una combinación entre satisfacción e indiferencia.

Siguió bajando decidiendo entrar al hastag que mencionaban el articulo, miles de mensajes aparecieron respecto al tema, de personas acostumbradas a hacer escándalo por todo. Ninguna publicación tenía coherencia y hasta generaba risa como daban por hecho algunos cosas, ¿A caso ellos estuvieron ahí? ¿O al menos conocieron personalmente a Jeongin? Era puro sentimentalismo y mentiras. Compañeros de su colegio opinaban sobre su desaparición cuando nunca le habían dirigido la palabra. Parecía que lo importante en este momento era escribir el mensaje más sentimental posible para recibir favs, retweets y ser el centro de atención, en vez de rezar por el adolescente desaparecido.

Él sí conoció a Jeongin y estuvo ahí.

Jeongin fue un adolescente que conoció por casualidad en Internet. Como siempre pasaba. Era un chico bastante risueño pero al mismo tiempo retraído por su complicada situación familiar.

Comenzaron hablando por chat, siendo un "hola" que terminó en interminables charlas nocturnas. A Jeongin le hacía feliz hablar con Minho. Le había ganado cariño y un aprecio gigante, porque ¿Como no llevarse bien con alguien que tenga exactamente sus mismos gustos? ¡Encima era de su edad!

Minho lo hacia feliz. Mientras pasaban los días cada vez más necesitaba los mensajes del contrario y su atención. Con Minho no tenía que ser correcto, podía quiejarse todo lo que quería y llorar por mensaje a la par que contaba algún chiste para hacer reír a su amigo.

Sentía un aprecio genuino por Minho, por eso Jeongin no dudo ni dos segundos en aceptar la invitación de Minho a su casa a la primera oportunidad cuando las cosas en su casa se pusieron feas.

Porque Minho le había prometido protegerlo.

Porque Minho había prometido cuidarlo.

Tardo poco en darse cuenta del error que había hecho.

Su mejor amigo de Internet era un adulto de 25 años.

Internet Friends - minsungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora