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Se despertó agitada. Su pecho subia y bajaba fuera de ritmo. Su frente estaba bañada de sudor frío al igual que el resto de su cuerpo, solo sus mejillas contrastaban con el frío de su cuerpo por las tibias lágrimas que se deslizaban por sus ojos. Había sido una pesadilla.

Aunque sus manos temblaban las paso por su cara acomodándose el cabello y limpiado las lágrimas. Tenías los ojos fijos en la oscuridad de su pequeña habitación intentando procesar todo lo que había soñado hace unos instantes. El maletero, los gritos, la presión en sus muñecas. No era la primera vez que soñaba algo de este tipo, desde que vivía en Seúl y todas las cosas que ocurrieron el primer año de su llegada era perseguida por sus recuerdos.

Alexa poco a poco logro estabilizar su respiración y tranquilizarse. De reojo vio la hora confirmando que era de madrugada, suspiro con pesadez apoyando su cabeza en sus manos. Su mente giraba en un espiral y al parecer no tenía intenciones de parar. No había estado durmiendo bien y tener esas pesadillas no le estaba ayudando mucho. Los trabajos de fin de año de la universidad, pagar la renta, distanciarse de Jisung y las otras cosas que pasaban en su vida ya era suficientes para que ahora su mente le privaran del sueño.

Mentalmente nombro todas las cosas que pasaban en su mente para darle un orden a su cabeza y pensamientos. Se quedó pensando cuando nombro a Jisung y toda la pelea que habían tenido días atrás al frente de su antiguo colegio. La forma en la cual hablaba el chico era extraña, no tenía que conocerlo para saber que normalmente no actuaba así. Nadie en su sano juicio defiende tanto a una persona que no conoce.

Al pensarlo, una cosa hizo click en su cabeza. Por un segundo se vio reflejada en Jisung. Su comportamiento había sido igual al de ella a los 17.

Ese pensamiento le heló la sangre. Al parecer estaba viendo la historia repetirse al frente de sus ojos. No estaba segura de las conexiones nerviosas que habían hecho sus neuronas pero la concidencia y el miedo estaban presentes. Asi que agarro su celular y llamo a su amigo. Después de unos cuantos tonos una voz adormilada contestó.

- ¿Serias tan amable de decirme porqué me llamas a las 4 de la mañana? - fue lo primero que se escuchó por la línea.

- YangYang, esto sonará raro pero necesito que me digas todo lo que sabes de ese tal Minho - dijo la chica yendo al grano.

- ¿Ahora? Entiendo que te parezca extraño ese tipo pero tu revelación espiritual tenia que ser justo ahora? - preguntó entre bostezos.

- Al parecer si tenia que ser ahora, nos vemos en el estudio a primera hora - contestó moviendo las sábanas de su cama.

- ¿Eso no fue una pregunta cierto? -

- No, no lo fue - sonrió levantándose de la cama.

- Me vas a matar un día de estos - se escuchó antes de que se cortara la llamada con una sonrisa por parte de la chica.

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- ¿Ahora si serias tan amable de decirme porque estoy aquí un sábado a las 8 de la mañana? - preguntó el chico cruzándose de manos al sentarse en una de las sillas del estudio.

- Tengo un mal presentimiento sobre ese tal Minho - murmuró la chica bajando su mirada de la laptop.

- ¡Oh Wow que bien al parecer no soy el único con sentido común en este sitio! - se burlo YangYang moviendo las manos.

- No en es sentido idiota. Me refiero a que Jisung pueda estar en peligro o algo por ese estilo - indicó la pelimorada.

- ¿Espera te refieres a peligro peligro? ¿O sea peligro de verdad? - pregunto levantándose.

Internet Friends - minsungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora