Gate: La Lucha que Elegimos. [Traducción]

Capitulo 2

Disclamer: esta historia tiene el propósito de entretener y sin fines de lucro, la franquicia Gate no me pertenece. créditos a su respectivo autor.

Este fanfic no es de mi sutoria, solo me encargo de traducir con el permiso del escritor para poder mostrar su bello trabajo a más personas. Si quieren leer la historia en su idioma original pueden buscarla en (https://www.fanfiction.net/s/13709016/1/The-Fight-we-Chose) creada por (DFMRCV). Que lo disfruten

'Hola'- normal.

"Hola" – dialogo.

'Hola '– pensamiento.

Capitulo 2

Zona de aterrizaje X-Ray

Cortijo, a 6 leguas de la Ciudad Comercial de Itálica.

"¡Vamos, rápido!" dijo el granjero, atando las cosechas que había podido traer a la carroza, con el sol apenas se elevaba sobre la lejana cordillera.

Su esposa con una niña pequeña se subió rápidamente y dijo: "¡Dejé algo de comida preparada en la mesa!"

"¡Bien! Tal vez eso los detenga por un tiempo." dijo el hombre, subiéndose a la carroza junto a ella y enviando el caballo para que avanzara.

"Si nos damos prisa, deberíamos llegar a Itálica antes del mediodía".

Se mueven lo más rápido que pueden, pasando por viejas granjas abandonadas y decrépitas, algunas desechas y ya cayendo a pedazos, algunas ya quemadas completamente.

La mujer mantuvo su vista en los altos campos de maíz y pasto que plagaban el campo, su propia granja se encogió detrás de ellos. Miró preocupada a su hija, la niña de cuatro años dormida en los brazos de su madre, felizmente inconsciente del peligro en el que se encontraban. Ambos padres tenían una mirada de cautelosa locura en sus ojos mientras avanzaban por los campos solitarios de lo que una vez había sido una comunidad mucho más vibrante.

Llegaron a la carretera principal y sus corazones se hundieron.

"¡Hola! ¿A dónde vas?" preguntó un hombre con armadura con un bigote cuidadosamente peinado, sonriendo de oreja a oreja, una espada larga descansando sobre sus hombros.

"¡N-nos dirigimos hacia... hacia Itálica, señor... nosotros... dejamos comida y agua gratis para que sus hombres disfruten si lo desea!" dijo rápidamente el granjero.

"Ah, eso es ciertamente apreciado. Desde que llegaron esos monstruos de más allá de la Puerta, ¡realmente no hemos tenido muchas oportunidades para descansar!"

"¿Oh?"

"¡Sí, señor! La mayor parte del Ejército Imperial desertó, así que ahora hay muchos... muchos hombres deambulando por el campo en busca de comida, agua... mujeres".

El granjero no tuvo que mirar a su esposa para saber que estaba temblando. "Yo... puedo darte toda nuestra comida, toda nuestra agua, pero por favor-"

"No, no... no creo que lo entiendas. Estamos obteniendo tu comida, tu agua y tu esposa sin importar lo que hagas. Todo lo que puede cambiar es lo rápido que-"

"¡Corre!" él gritó.

La mujer salió del carro en un segundo, agarrando a la niña lo más cerca que pudo mientras su esposo recogía una espada desafilada de debajo de su asiento.

El hombre que bloqueaba la carretera suspiró y dijo: "Realmente no lo entiendes".

La mujer llegó a los altos cultivos solo para ser empujada hacia la carretera principal por un hombre corpulento que vestía la Armadura Imperial y sostenía una lanza que apuntaba a su cuello.