Espadazos

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El grupo fue a un sitio llamado Ghost Moon, al llegar se dieron cuenta que es un bar gay. Armando y Nicolás se sentían un poco nerviosos ya que no era el ambiente de ellos, pero después Nicolás lo ignoro porque le importaba más tomarse unos traguitos.

- Hermano, oiga – dijo Armando haciéndole señas a Mario.

- Dígame, mi estimado presidente – dijo Mario.

- Yo me quiero ir de aquí hermano, me siento super incomodo – dijo Armando desesperado.

- Pero, porque no es su primera que entra a un sitio de estos – dijo Mario.

- Si, lo se. No se le olvide que esa vez fue porque necesitaba cerrarle la boca a Hugo Lombardi y hacer que regresara a Ecomoda – dijo Armando susurrando.

- Pues en este momento usted no vino para suplicarle de rodillas a un hombre que vuelva a la empresa, a menos que estando borracho le dé por suplicarle a otro hombre que lo saque a bailar – dijo Mario mofándose de su amigo.

- No sea idiota Calderón, yo me quiero ir de aquí – dijo Armando.

- Usted no me puede dejar aquí botado con todos ellos, así que mi Alpha póngase las pilas y estese pendiente de sus invitados por favor – dijo Mario mientras empujaba a su amigo para que avanzara.

Los hombres escogieron una mesa grande empezando a beber y conversar.

- No no, ahora no – dijo Hugo algo desanimado.

- ¿Qué ocurro Hugo? – dijo Allan.

- Michecito su merced, me está llamando por el Ring Ring ahora regreso – dijo Hugo mientras hacia como abejorro.

Cuando hicieron espacio para que Hugo pudiera salir de la mesa, un objeto cae al suelo.

- Oiga Nicolás, ¿parece que se le cayó esto a usted? – dijo Benny siendo amistoso.

Armando y Mario, quisieron reírse al ver la foto de la Peliteñida.

- Oh yaya muchas gracias, eh Señor Benny – dijo Nicolás algo apenado.

- No se preocupe Nicolás, me imagino que debe ser persona muy importante para usted – dijo Benny.

- Eh si si, claro estamos casi casi conectados usted me entiende – dijo Nicolás.

- Estamos hablando de Patico, nuestra secretaria de presidencia – dijo Freddy ya mareado.

- Si Freddy, oiga por cierto ¿se siente bien? - dijo Mario.

- Pues ahí dándole doctor – dijo Freddy mareado.

- Freddy en este momento voy al baño, si usted desea podría acompañarme para ver si podemos hacer que se le quite el malestar – dijo Benny.

- Muchas gracias la verdad si necesita ayuda para ponerme de pie, si son tan amables – dijo Freddy ya queriendo vomitar.

- Déjame ayudar Ben – dijo Allan moviéndose rápido para ayudarlos.

Armando, Mario y Nicolás se quedaron solos.

- Nicolás ¿puedo ser honesto con usted? – dijo Armando ya un poco mareado.

- Claro, doctor cuente conmigo – dijo Nicolás.

- No es que me quiere meter en su vida, solo que le quiero dar un consejo como amigo porque usted me termino cayendo bien vea esa mujer no es para usted – dijo Armando.

Locuras entre machos de EcomodaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora