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⃝⃕XXXII

Jungkook miró su reflejo en una de las ventanas del salón, la mayoría de sus compañeros estaban distraídos con sus amigos, él sólo podía pensar en lo estúpido que era y lo lamentable que debió de verse frente a Taehyung el sábado pasado. Su mente era tan malvada que repetía la escena una y otra vez hasta hacerle casi querer volverse loco.

Con suerte hasta ese momento Taehyung y Jihyo no habían llegado a la primera clase, estaba lo bastante avergonzado como para mostrarle su rostro al rubio. ¿Cómo era posible que de todas las personas, tenía que haber sido estúpido frente del rubio? Detestaba su vida, no podía creer que sus actos siempre tenían consecuencias. No les llamaban el grupo de tontos por nada, era bastante obvio que él era el capitán. Un capitán que había hundido su barco de conquista, el cual realmente no existía, porque él ni siquiera había comenzado a coquetear con el menor y tampoco Taehyung era capaz de saber que sus sentimientos no sólo eran amistosos.

Un suspiro abarcó el espacio, su aliento mancho el vidrio de la ventana a pesar de no sentirse frío, el sol estaba en lo alto y justo cuando Jungkook se movió le dio en los ojos cegandole unos segundos, tuvo que elevar su mano y tallar uno de sus ojos para poder quitar la luz cegadora que se marcaba en ellos. Las imágenes de ese fin de semana era sumamente incómodas, vergonzosas y patéticas.

¿Cómo se le había ocurrido hacer eso?

La emoción del momento le había lanzado a aventurarse, sin saber que las consecuencias serían mayores a un simple acto que su mente le gritaba y proclamara que llevara acabo. Jungkook se imaginó miles de escenarios en ese día, pero ninguno al que había provocado él mismo.

Miserable era la palabra que lo describía, no había podía pegar el ojo en esas dos noches y eso que apenas llevaba poco tiempo de haber cometido semejante estupidez. ¿Qué haría en esos días que faltaban?, ¿Cómo le diría a su padre que estaba metido en un gran problema? No había ni una justificación para eso, incluso prefería mil veces estar castigado con la cancelación de sus tarjetas de crédito a estar sufriendo calambres en el estómago por sus actos estúpidos. Jungkook negó con su cabeza, debía de dejar de lamentarse y tomar cartas en el asunto antes que lamentarse como un mocoso inútil, había cometido un error, debía de arreglarlo él mismo.

Buscar un trabajo sonaba bien, pero el gran problema era que jamás había trabajado en su vida. Era un inútil. Además de que cualquier trabajo normal, no le daría la suma de dinero que necesitaba.

"Kook" Saludó alguien poniendo su brazo sobre su hombros, Jungkook giró su rostro a su costado izquerdo. Encontrado un cuerpo que no se imaginó que le hablaría en público.

"Jackson" Saludó bajo, notando que sus compañeros le miraban atentos a sus acciones, los únicos populares de su salón no estaban así que ver la cercanía de él con ellos, sumando el tener un saludo, acercamiento a Seok Jin y la pareja del año ya era cosa seria.

"¿Cómo estás, hermano?" Dijo en forma de saludo cuando le encaró. Jeon era más alto que el mayor, así que Wang le obligó a encogerse unos centímetros para no quedar mal ante los ojos curiosos.

Jungkook sabía que Wang era de los populares por su grado económico, por las grandes peleas que hacía en cada sitio de la institución. No sabía en qué grado seguía siendo amigo de Namjoon, pero era consciente de que no había logrado ser desagrado de él.

"¿Debo de contestar a eso?" Murmuró bajo al mirar a otro lado incómodo por los ojos curiosos de Jackson, sentía que le estaba mirando hasta lo más profundo de su alma. Algo le decía que el mayor ha sabía acerca de su escenita en la casa de Seok Jin. ¿Qué habría hecho si hubiera bebebido? ¿Cuánto dinero le había costado a sus papás cada vez que hacía una fiesta y bebía?