Capítulo 54

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Sigues narrando tú

Mi corazón se detuvo al escuchar aquella pregunta "¿Te gustaría ser mi novia?" vamos _____________, analiza bien las palabras antes de hablar, no lo arruines, claro que quieres, pero tranquila, note le tires encima, solo di que sí y sonríe, no, no, eso no ¡Ya calla! me machacaba el celebro en mi interior.

Suspiré y sonreí, me devolvió la sonrisa con nerviosismo, a través de sus ojos se notaba la intriga de mi respuesta y el miedo al no.

Yo(Tu): Claro, me encantaría ser tu novia, Jungkook —dije antes de que el me plantara un tierno beso en los labios—

Jungkook: Te amo —susurró sobre mis labios— y mucho más de lo que te puedas imaginar —me sonrió—

Yo: Yo también te amo —le devolví la sonrisa—

Terminas de narrar.

Narra Jungkook

Sin duda, uno de mis mejores días en mi corta y aburrida vida, Kim _______________ es mi novia ¡Qué bien suena!

Yo(Jungkook): ¿Quieres que te lleve de regreso? —dije mientras ella jugaba con sus pies en el suelo—

Tu: Claro, si quieres —dijo si mirarme— ¿Ya te quieres ir? —levantó la mirada hacía mí—

Yo: Me quedaría toda la vida sentado en esta banca si tú estás conmigo —sonreí— pero tus padres me matarían si no te llevo a casa pronto

Tu: ¿Por qué eres tan tierno? —sonrió— no quiero volver a casa —apoyó su cabeza sobre mi hombro—

Yo: Tienes que volver y yo debo ir a mi casa también —le expliqué, ella solo suspiró—

Tu: ¿Qué tal si llamamos diciendo que se nos ponchó una rueda del auto y que debemos quedarnos aquí?

Yo: Ni lo sueñes, princesa —me moví, ella se sentó derecha— aunque me encantaría, mañana hay que ir al colegio y hay exámenes, luego comemos juntos, si quieres, pero con la condición de que volvamos ahora

Tu: Esta bien —se levantó de la banca y jaló de mi mano— ya vamos Jungkook

Yo: ¿Jungkook? no, deja de llamarme así —me levanté yo también— inventa algo más original

Tu: Yo no invente decirte Jungkook, así te llamas ¿no? —río mientras caminábamos hacía el auto—

Yo: Lo sé, pero podrías pensar en un lindo apodo para tu novio ¿No crees? —pase uno de mis brazos por su cintura—

Tu: ¿Cómo quieres que te llame? —dijo mirando el cielo— no se me ocurre nada —sonrió—

Yo: No lo sé, solo piensa

Tu: Piensa tu uno para mí —dijo mientras esquivábamos a los pequeños que corrían por el parque—

Yo: Tu primero

Tu: Okey, yo te diré... —dijo pensativa y luego sonrió, tenía una idea— Kookie

Yo: ¿Kookie? —la miré extrañado— no es original, ya me habías dicho así

Tu: Oh, que malo —dijo fingiendo enojo—

Yo: Pero no dije que no me gustara —besé su mejilla a la vez que sacaba las llaves del auto de mi bolsillo—

𝘼𝙢𝙞𝙜𝙤𝙨 𝙘𝙤𝙣 𝙙𝙚𝙧𝙚𝙘𝙝𝙤𝙨 ; 𝙏𝙚𝙧𝙢𝙞𝙣𝙖𝙙𝙖Donde viven las historias. Descúbrelo ahora