Lagrimas & Guerra

CAPITULO 2

Capitulo 2

La decepción era mucho mayor que la tristeza que sentía Heidy, al haber vuelto a la realidad.

Lani, se dirige a las ventanas y abre las cortinas de un solo movimiento dejando entrar la luz del día, regresa a la puerta de la habitación en busca de un carrito que siempre llevaba cada mañana y cada horario de comida, coloca una mesita en las piernas de la paciente donde colocó el desayuno y se retira con su fantástico caminar. El sonido de sus tacones rompía el silencia de aquella silenciosa mañana en el hospital.

Heidy, detestaba la comida sinsabor del hospital. Pero, no prestaba atención al jugo de naranja sin sabor que bebía o al sándwich de jamón que masticaba, sólo pensaba en aquel sueño que había tenido .

-¿Estaba sabroso?-.Preguntó Lani, a Heidy, mientras entraba en la habitación.

- ¡si , muchas gracias !- respondió Heidy, un poco tímida.

La enfermera se coloca en frente de la paciente y se sentó en la cama. - el doctor me dijo que tu bebé está mejorando- . Dijo Lani. Pero le tomará un poco de tiempo recuerda que a esa edad no son lo suficientemente fuertes.

- ¡Gracias! - . Fue la única respuesta. Pero ella estaba feliz de que ahora podría cambiar su estilo de vida y quizás esta era una nueva oportunidad para ella y sin pensarlo abrazó fuertemente a Lani.

-No hay de que, es mi trabajo - dijo Lani, guiñándole el ojo.

- Pienso cambiar mi estilo de vida - dijo Heidy.- Quiero darle a mi hijo lo que nunca tuve quiero que él sea feliz y que pueda vivir en mejores condiciones que las que yo he tenido y así poder verlo sonreír. - los ojos de Heidy, se aguaron y un nudo en su garganta no le permitió terminar de hablar.

-Estoy muy orgullosa de ti - dijo Lani, al notar que por fin todos sus consejos estaban dando frutos.-Espero y después de tu internamiento podamos seguir en contacto-.

-¡Si , claro!-Afirmó.

Un momento de silencio estaba inundando la habitación, Lani, se encontraba recostada con los codos en la nuca mirando fijamente el blanco techo, después de unos minutos dijo -¿te puedo contar algo?.

-¡claro! - Heidy, estaba feliz de que aquel inmenso silencio se acabara, pero ahora la intriga era mucho mayor.

- Yo estuve aquí hospitalizada - dijo Lani, que se encontraba mirando el techo.

-¿Por qué?

Lani, pareció no oír a Heidy. Hace 3 años yo estuve también hospitalizada en esta tranquila habitación sus paredes pintadas de blanco hacen sentir a quien esta aquí la esperanza de vivir aun cuando ya has perdido tu razón de existir o te sientes sin un propósito.

Heidy, solo guardaba silencio oyendo atentamente.

-Aquel día estábamos en el coche mis dos amadas hijas Ana y Ada y mi esposo Calvin. – Lani, guardó silencio por unos segundos y luego de un suspiro contó algo que nunca pensó en volver a decir:

Marzo 9 - 1995

- Deberías dejar de conducir- comunicó Lani, a su esposo Calvin. - estas ebrio y conduces-.

- No es tu problema- gritó fuertemente Calvin.- Lo que haces es amargarme la vida-.

- Deja de decir esas cosas frente a las niñas. Deberías considerar cambiar tu estilo de vida-.

- Yo hago con mi vida lo que se me antoje, desaparece de mi vida.

-Tú solo quieres librarte de la responsabilidad de tus hijos - dijo Lani, entre lagrimas.-Deberé irme con las niñas a casa de mi madre - .Pensó casi que con el corazón en la mano.