Cada Semana •LARRY STYINSON•

Cuatro|사

Una mano raposa paso sobre su cabello perfectamente peinado. Una retocada no hacia mal.

Las puertas del elevador se abrieron mostrando en aire de suficiencia no tan altura de él, su secretaria Amanda se acerco rápidamente pero decidida.

-Señor Styles, muy buenos días.-Saludo en un tono meloso.

-Buenos días Amanda. - respondió Harry con el mismo tono.

-La chica de cabellos rizados negros bajo su mirada ante el color esmeralda puesta en ella. Harry Styles era un jefe buenazo. Ademas de tener porte, al caminar las miradas no le hacían falta hablando de mujeres tanto como hombres. Era un chico respetable en su imperio creado por él mismo y nadie más, lo cual se sentía orgulloso y no dudaba en sacar eso en cara a cualquier competencia que se aproximara. Con atribuir solo unas cuantas palabras ganaba la atención de las personas, hasta del ciego y sordo amaban verlo y oírlo.

¿Como se ganaba Harry Styles esta gran superioridad y éxito ante los demás? Simple. Con mentiras... De pequeñas hasta grandes mentiras de la escala de blancas a negras, este chico usaba su alta inteligencia en engañar gigantes nómadas empresarios de Londres, calculaba cada palabra que salía de la boca de sus contrincantes empresarios. Los manejaba, oh... Claro que los manejaba a su gusto. ¿Quien no haría negocio con un joven dotado, hablando tanto físico como intelectual?. Harry Syles tenía una gracia para confundir a las personas y llevarlas hasta el punto donde él los quiere tener.

Es capaz de comprar grandes empresas sin que sus dueños se enteren que han firmado un simple papel donde dan todo su poder al chico de rulos.

Varios le tienen miedo a su pequeño negocio pero grande imperio.

Tenia poder y para él era poco.

Ahora tenia que buscar en su cerebro rápidamente una excusa que no fuera palpable a sus "hormiguitas", (el nombre que les dio él mismo a sus trabajadores, para Harry no había mas autoridad que él mismo, teniendo la razón en todo lo que salía de sus rosados y fijos labios e igualmente si quería podía destriparlos con sus pies.) sobre la desaparición de su antiguo compañero Alex, su víctima. Que claro está, que hoy no vendría a trabajar.

Ante el pensamiento de lo ocurrido ese día, sonrió. Si que había disfrutado.

-Señor Styles, tiene dos nuevos contrincantes sobre la empresa. -informo Amanda, siguiéndolo a paso lento tras de él hacia su oficina. - La nueva empresa de los Muller's que enviaron notificaciones sobre sus nuevas ventas y compras, e igual los nuevos empresarios que quieren comprar parte de HStyles'C. Para su beneficio... Creen que nos superaran. - agregándole su ultimo comentario en forma de burla, Amanda río, pero su risa fue acatada con la mirada seria de su jefe. Harry siempre le gustaba bromear con su personal, era muy sociable y amistoso. Pero esa mirada ante su broma le hizo erizar, él no era así de serio, algo sucedía.

Cambiando rápidamente de tema dijo:

-Por otro lado el detective que me pidió ayer por la noche llega en... -Miro su elegante reloj dorado de su muñeca- 24 minutos exactamente. Dijo que la información pedida estaba lista.

Harry sonrió. "Muy bien" pensó.

-Dile a Franco Muller que quiero tener una reunión con él. Si pregunta el porqué, dile que no sabes nada, que solo cumples las ordenes.-Amanda asintió. - hmm, con la pequeñez de esos nuevecillos empresarios, no demos nuestra atención a ellos. Que quede claro que el que compra o vende soy yo. No es la decisión de los demás, si quieren ser parte de HStyles'C. Yo soy el que manda aquí. - poso sus codos sobre el escritorio marrón reluciente de su estable oficina, entrelazo los dedos y poso su barbilla sobre ellos, dirigió su mirada a su secretaria.- Cuando llegue el detective me lo haces pasar inmediatamente. - Amanda alzo una ceja intrigada por el comportamiento de su jefe, ¿No abra dormido bien anoche? Se pregunto.

-Amanda... ¿Acaso no oíste lo que te ordene?.- Su frió tono de voz saco de pensamientos a la esbelta chica.

- Oh si-si, lo siento señor. - Dijo pavoneando suavemente la mano y salió lentamente de la oficina. Harry se puso cómodo en su silla y se quedo un rato pensando en esos ojos azules que lo habían intrigado.

"Seria bonito verlos rodeados de color rojo y algunas cuantas lágrimas..." y con este pensamiento en su cabeza comenzó a ojear uno de las varias carpetas que tenia sobre su escritorio.

(...)

Dos toques en la puerta quitaron su vista de la notificación de uno de sus clientes habituales. Un "Adelante" por parte del chico de rizos, fue todo para que en la puerta se asomara Dabe Fill, un detective privado y muy astuto de la parte oscura de Londres.

-Dabe Fill, que gusto su visita, pase tome asiento. - Con su mano levantada le indico el puesto, su blanca sonrisa radiante.

-Señor Styles. -Saludo estrechando la mano fuerte de Harry.

- Harry, llámame Harry por favor. - dijo posando sus palmas en cada uno de sus muslos. Dabe poso  un portafolios en el escritorio frente a él.

- Bueno Harry, a lo que vine.- La seguridad y directividad del detective le gusto a Harry, simplemente iba al punto. Dabe desabrocho los dos lados de la maletín marrón y saco un sobre, lo poso a un lado del escritorio para que Harry lo tomara. Antes de hablar mojo sus labios finos y rasco un poco su incipiente barba. Todo fue calculado por los ojos del chico.

- Cada parte de información se encuentra ahí. -indico con su dedo anular- Desde sus seguros sociales hasta lo que esta haciendo en estos momentos. - Dijo el detective, con una mano cerro el portafolios, lo dirigió hacia su pierna inclinada sobre el tobillo. Espero en el silencio dado por su contratista, sus ojos fijos en los de Harry. 

A unos minutos, la voz gruesa corto el aire.

-Amanda, mi secretaria le dará la paga. Se puede retirar. - Ordeno con voz firme y sin mirarle. El detective se levanto y estirando la mano nuevamente en forma de despedida hacia Harry y al no recibir respuesta, se retiro.

Habían exactamente 5 hojas rellenas de información personal y todo estaba en sus manos.

Sonriendo leyendo nuevamente en voz alta.

"Nombre: Louis William Tomlinson Lewis."

Este seria un lindo día.