Día 1: Electricidad ⚡

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        Sus brazos comenzaron a emitir un fulgor azul por unas cicatrices como rayos que se desprendían de sus hombros a sus muñecas. La joven lo intentaba con todas sus fuerzas, pero al ver una chispa salir de entre sus dedos, se emocionó tanto que se distrajo por completo y perdió la concentración. Un calambre terminó por recorrer todo su cuerpo, rizando su largo cabello negro de puntas amarillas.

        —Bueno, no ha estado mal— dijo una voz detrás de ella.

        La joven, al girarse, pudo ver a su mentor, un anciano con sombrero de copa y gafas de aviador. Una barba blanca que cubría la mitad de su rostro y unas gafas de cristales negros redondos que ocultaban su mirada. Llevaba, además, una bandana roja sobre su pelo, mostrando algunas rastas que colgaban por la nuca. Vestía con un traje muy elegante y portaba un bastón al que parecía tenerle mucho aprecio.

        —Pero no ha sido suficiente... ¿Cómo voy a convertirme en la Heredera de la Electricidad si no soy capaz de controlarla? —replicó la joven.

        —¿Y cómo pretendes vengar a tu padre y a Nueva Luz si cada vez que avanzas sientes que vas para atrás?

        La chica terminó por juntar las manos de nuevo, intentándolo con todas sus fuerzas y liberando una gran cantidad de electricidad sin control. Había liberado mucha y apenas podía controlarla, pero demostró al anciano que la venganza iba en serio. Y que daría todo lo que su cuerpo pudiera soportar y más con tal de llevarla a cabo.

Taletober 2021Donde viven las historias. Descúbrelo ahora