Capítulo 14

2.1K 261 36
                                    

Cuando abrí mis ojos una tenue luz me recibió. ¿Estaba en mi habitación?

Estaba yo cubierta por una manta suave y traía puesto un camisón.

-No puede ser -resongué al pensar que una vez más Konro me habría cambiado de ropa.

Y pensando justamente en él sentí la puerta abrirse.

-Qué bien que despertaste, señorita -me dijo con una sonrisa.

-Konro -dije algo apenada-. Siento mucho todo lo que hice.

-Mmm, bueno, la verdad es que me preocupaste mucho. Pero ahora estás aquí y estás bien.

-Eres demasiado bueno, Konro.

Él me devolvió una sonrisa genuina.

-¡Ah! ¿Cómo esta Bienimaru? -pregunté preocupada.

-Él está bien, solo tiene algunas quemaduras.

Konro notó mi expresión preocupada.

-No pongas esa cara, el capitán es fuerte, un par de quemaduras no son nada.

-Sé que es fuerte pero...

-Ven, acompáñame a verlo.

-¿Eh? -dije sorprendida, mi corazón dio un salto. ¿Verlo? No sabía si estaba preparada para eso.

Caminé al lado de Konro en silencio hasta que llegamos a la habitación del capitán. Él corrió la puerta suavemente y me indicó que pasara. Acto seguido se retiró dejándome sola.

-Konro -intenté llamarlo para que no se fuera pero me ignoró.

Miré en dirección a Benimaru. Yacía en su futón, con los ojos cerrados. Yo no sabía que hacer.

Tenía los brazos vendados. Mi corazón se estrujó dolorosamente.

Quería pedirle disculpas una y otra vez. Arrodillarme si era necesario. Pero estaba dormido. Pensé que mejor regresaba en otro momento.

Me dispuse a salir.

-¿A dónde vas? -oí su voz detrás mío.

-Esto... Pensé que dormía, capitán.

-¿Por qué vuelves a tratarme con formalidad? ¿No te dije que me llamaras por mi nombre?

-Si, lo siento -bajé la mirada.

Él abrió los ojos y me inspeccionó de arriba a abajo.

Yo no me podía ver, pero apostaba que en ese momento me había puesto como un tomate.

-Acércate.

-¿Eh? -mi corazón se disparó.

-Que te acerques -su tono daba algo de miedo.

Tragué en seco y obedecí. Me acerqué a su futón y me arrodillé a su lado. Él me siguió con la vista en todo momento sin apartarla un instante.

Todo estaba en silencio y el espacio se sentía incómodo e intenso. Pero de pronto, algo que no esperaba. Benimaru me rodeó con los brazos y me apretó con fuerza hacia él.

No supe cómo reaccionar. Me puse rígida como el hierro ante el inesperado suceso.

-No lo vuelvas a hacer. No vuelvas a ponerte en peligro de esa manera.

Me sorprendí mucho. No pensé que le importara tanto al capitán.
Su cuerpo se sentía duro al contacto, pero la calidez era acogedora, demasiado, tanto que me permití cerrar los ojos para disfrutarla aún más.

-No te duermas otra vez. Ya estás haciendo costumbre lo de dormirte en mis brazos -me dijo y lo aparté apenada. Me levanté rápidamente y me dirigí a la salida.

-Aún no te he dado permiso para irte.

-No me das órdenes -le dije furiosa y enseguida me arrepentí de mis palabras. No sé por que había dicho eso.

-Soy tu capitán, debes cumplir mis órdenes.

-Pensé que no era bienvenida en el escuadrón.

-¿Acaso no escuchaste todo lo que te dije ayer? ¿O es que te dormiste mucho antes?

Yo me relajé un poco.

-No lo recuerdo.

-Qué fastidio -dijo frotándose la cabeza-. No voy a repetir lo que te dije ayer, ya fue suficientemente vergonzoso. Solo te diré que puedes quedarte.

Estaba algo confundida y feliz al mismo tiempo. Podría quedarme y ser parte de la séptima. En la compañía había encontrado lo que jamás tuve en mi vida. Amigos que se preocupaban por mí y que incluso metían las manos al fuego para salvarme, literalmente. Si me iba, extrañaría terriblemente la dulce sonrisa y la suave voz de Konro, las divertidas peripecias de Hina y Hika y... por supuesto, extrañaría a Benimaru.

-¿Además de eso me dijiste algo más?

-Ya dije que no lo repetiré. Ahora ve con Konro, le di instrucciones sobre tu castigo.

Había olvidado lo del castigo por completo. Pero ni la tarea más severa me quitaría la chispa de felicidad que llevaba dentro. Sucedieron tantas cosas que no sabía como procesarlas todas y aquel súbito abrazo me había dejado las mejillas encendidas.


🥀🗡🥀🗡🥀🗡🥀🗡🥀🗡

Aaaah, ojalá Benimaru me abrazara así. Moriría en el acto, pero no importa, porque moriría feliz :'D

͡° ͜ʖ ͡° por cierto, comencé a subir un fanfic de Tokyo Revengers (Keisuke Baji x tú). Es que Baji es bellísimo UwU espero que Beni no se ponga celoso jijiji.

Me despido por ahora, La Sacerdotisa Roja.

Recuerden sus donaciones al templo de la sacerdotisa ☆


🥀🗡🥀🗡🥀🗡🥀🗡🥀🗡🥀🗡

Benimaru Shinmon y tú //// Fire Force FanficDonde viven las historias. Descúbrelo ahora