Skagen☕🍁

🍁Hojas Canela

Una boda sencilla, mas que sencilla secreta fue lo que paso en otoño de ese mismo año, Petra había usado el vestido de su madre, era la tradición , Levi un traje de gala que fue elegido por Hanji, fue mas como amiga que como comandante.

La reina Historia Reiss, había accedido en secreto brindar un pequeño espacio para ello, no fue una boda civil fue mas como una boda militar.

Al estar frente al altar los nervios no hicieron esperar y sostuvo con gran fuerza el brazo de su padre, con una sonrisa y carisias de su mano supo que todo estaría bien. Al frente Levi no dejaba de admirar la limpieza del lugar, sin embargo, el brillo de aquella chica lo fascino aún más , el moño suelto con aquel broche azul en su cabeza, el velo cubriendo su rostro que sin éxito alguno dejaba ver lo regocijada que estaba, el vestido aperlado con encajes en los brazos y en la copa, en su brazo derecho un brazalete de piedras doradas se lograba avistar.

Aparto el velo la mirada gélida que se escondía, lo hizo mostrar una sonrisa leve , y él no se quedaba atrás, pues Petra no dejaba de ver los ojos zafiro de aquel hombre y esa piel tan tersa, al dar el si en las preguntas mas bellas y profundas fundieron sus labios mientras la reina gritaba de felicidad junto con Hanji.

Una bella celebración se dio, música de violines y alegre, los pocos presentes bailando sosteniéndose por los brazos dando giros al derecho y al revés. Pixis y Hanji reían al ver como Levi apenas podía mantener el ritmo, Petra lo alentaba con una sonrisa, se tomaron de las manos y dieron vueltas mirándose uno al otro. Jamás olvidaría ese rostro ameno y reluciente.

Tomarían unos días como luna de miel, llegando a una cabaña al casi norte del muro Rose, riendo y tratando de hacer el menos escandalo recordando la fiesta.

-Debiste ver el rostro de Pixis cuando uno de los meseros quito en vino-dijo a carcajadas

-Ese viejo alcohólico.

Estaban cansados, pero era su primera noche juntos a solas sin estar dentro de la legión con los papeles de subordinada y capitán, se encontraban acostados sobre la cama tomándose de las manos, la pelirroja comenzó a recitar un pequeño poema entre dientes y susurros.

-¿Qué dices?-pregunto Levi

-Solo recitaba, verte me hizo crear un poema en mi mente-

-¿De verdad?-asintió con la cabeza-¿Podrás recitarlo en voz alta?.

Con mucha vergüenza asintió, cerro los ojos y comenzó:

"Nunca quise ser malo o enfermo
Estaba viviendo en el borde
Justo entre el Cielo y el Infierno
Y estoy cansada de eso

Todas las cosas que haces
Y la forma en que te mueves, envíame directamente al cielo
Y bebé, lo que nunca te dije realmente eres mi leyenda viviente."

Acaricio sus mechones anaranjados
-¿Leyenda viviente?.

-Si, puedo decirte que te amo, amo el hombre que eres, Levi Ackerman, el ser mas humano que eh conocido.

-Dilo, por favor. ¿Piensas que soy alguien que no ha perdido su humanidad?.

-Te amo, Levi-se acercó para besarlo-Y si, a pesar de todo luchas por los que ya no están y buscas cumplir la última misión que te dio el comandante, jamás desobedeciste ni una orden de el-
-No quiero perderte - la tomo de la cadera haciendo que sus cuerpos rozaran hasta que el quedo encima.

Se miraron con cierto temor-Petra...¿Quieres que sea hoy?-pregunto tembloroso ella tomo su barbilla dando carisias

-Tranquilo, yo también estoy nerviosa, quiero ser tuya esta noche y el resto de mis días. Tu serás mío de la misma forma. Comenzaron con suaves besos y carisias, el vestido y el traje quedaron en el suelo. Así fue como se entregaron por primera vez, con suaves empujones y suspiros