En un mundo donde la Nacion del fuego capturo al Avatar y lo mato el equilibrio esta perdido, espíritus deambulan en el mundo humano y la única forma en que los pocos humanos que quedan puedan resistir es solo con la unión de la nacion del fuego y...
Estaba perdido en mis pensamientos admirando el mar cuando una voz me saco de mis pensamientos -entonces príncipe Zuko, ¿emocionado? - me cuestiono mi Tío poniéndose a mi lado -emocionado? ¡¿EMOCIONADO?! Tío esto es horrible, peor que horrible es espantoso- dije indignado -como es que mi padre siquiera pensó en esta tontería- añadí con irritación -tomare eso como un no- dijo mi Tío a lo que lo mire fastidiado -yo no debería estar aquí Tío, yo debería estar casando al espíritu mayor, ¿y ahora está "princesa" se entromete en mi destino- respondí enojado -solo para eso he venido aquí...solo...solo para eso me han traído a casa- añadí en tono triste -sabes príncipe Zuko? El destino es muy curioso, cuando crees conocerlo este se enreda de formas inimaginables- me dijo con su semblante tranquilo a lo que suspire -llegamos- dije al ver la gran barrera de Azulon, nos adentramos en la ciudad y nuevamente pude admirar aquellos muros que no veía desde aquel día...nos adentramos al alació y Azula nos recibió -Sean bienvenidos- -porque no ha venido a verme mi padre?- cuestione a lo que ella rodo los ojos -el señor del fuego tiene cosas importantes que atender con respecto a su compromiso Zuzu- respondió ella sonriendo al ver como fruncia el ceño -esto es una estupidez- dije -disculpa querida sobrina, pero podrías decirnos cuales son nuestras habitaciones? Quisiera desempacar para tomar una taza de té- interrumpió mi tío -eso es trabajo de los sirvientes tío- respondió ella a lo que los sirvientes nos llevaron a nuestras habitaciones, la mia seguía siendo la misma, pude ver el dibujo de mi madre en la pared...no me había ganado el estar aquí...no había podido asesinar al espíritu mayor...no podía tener mi honor de regreso jamás por culpa de un estúpido compromiso -¿que te ocurre Zuzu? Luces contrariado, ¿acaso es por lo de tu boda? - pregunto con desdén -no estes tan contrariado hermanito- añadió -claro! Para ti es tan fácil decirlo a ti no te van a comprometer, agh ni siquiera entiendo porque hacemos esto, con un ataque directo podríamos acabar con los pocos que se oponen a nosotros- respondí enojado -bueno si eso crees dile a padre, seguro que estará fascinado de escuchar otra de tus ideas- dijo con gracia a lo que desvié la mirada en silencio -escucha Zuzu, no eres el único que no entiende los motivos de padre y por eso te sugiero que vigiles muy bien a tu prometida, a ver si puedes sacarle algo- -y porque yo?- pregunte de mala gana -porque es TU prometida genio- respondió Azula -llegara en dos días, suerte- dijo para finalmente salir.
Los dos días se fueron rápido, no había podido hablar con mi padre y aun así, aquí estaba esperando a la princesa y a su padre, el carruaje jalado por tejones topo llego, venia resguardado por dos espíritus algo raros, del bajo un hombre de aspecto duro y una chica como de mi edad, no pude verle la cara ya que estaba mirando Asia abajo, llevaba un kimono verde y flores de cerezo adornaban su cabello -es un placer tenerlos aquí- dijo mi hermana -el placer es todo nuestro- respondió aquel hombre -soy Kaion representante del concejo del páramo y esta es mi hija Mydari- dijo el -un gusto, soy la princesa Azula y él es mi hermano el príncipe Zuko- respondió mi hermana -nos complace mucho estar aquí no es verdad?- dijo más inmerso en la chica no respondí nada, era tan...familiar... -Zuko- me dio un pequeño codazo -no es verdad?- repitió sacándome de mi mente - para nosotros...también es un gusto conocerlos...soy...el príncipe Zuko..- mordí mi lengua al notar que eso ya lo había dicho mi hermana, sin embargo note que la chica se sobresaltó algo y subí la mirada "no me jodas" pensé al ver su rostro, ELLA? ¿MI PROMETIDA ERA ELLA? ¡¿Aquella chica que me había estado impidiendo la entrada al bosque de los espíritus por tanto tiempo, la que había evitado que me encontrara con el espíritu mayor?! Nuestras miradas se cruzaron y no pudimos disimular nuestra sorpresa y desagrado, ¿cómo era posible que de entre todas las personas mi prometida fuera la chica que siempre se estaba interponiendo en mi destino?
Narrador omnisciente
Ambos chicos estaban ahí atónitos frente a frente, se habían encontrado muchas veces antes el atacando a los espíritus y personas de su reino y ella defendiéndolos -bien, una vez que todos nos hemos presentado, permita que los sirvientes la escolten a su habitación "princesa"- dijo Azula con cierto tono de burla en su voz a lo que Mydari la miro mal y simplemente asintió, llevaron a la chica a una habitación y la dejaron ahí, ella se limitó a sentarse en la cama y suspirar -....el rojo no va conmigo- se limitó a decir aquella chica de ojos verdes para evitar sus verdaderos pensamientos
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