Cuando llego el verano no pude aguantar sin los cortes, asi que me sente en una silla y empecé a rascarme la rodilla intentando hacerme una herida, hasta que lo conseguí.
Era profunda y grande, no sangre ni nada, simplemente escocía. Pero hice mal, ya que por la tarde fui a la playa, y el agua era salada, asi que no me bañe en todo el día.
Al siguiente dia no pude mover en ningún momento, dolia mucho... me hice adicta a autolesionarme. No pude creerlo. Ese mismo verano, tuve un novio, al que le como nunca a nadie. Duramos ocho meses, pero la magia fue desapareciendo poco a poco y cortamos. Aún lo sigo queriendo, pero lo nuestro es imposible, ya que el vivia en Extremadura y yo en Murcia. Es un amor lejano, pero es un amor verdadero. Desde que lo conocí me fue enamorando. No es que el hicise mucho para enamorarme, pero lo hizo.