El Ayudante Sexy

Capítulo 4

Mew no le dio tiempo a Gulf de responder antes de que bajara la cabeza y cubriera la boca de Gulf con la suya, él pudo sentir el shock de Gulf en la repentina tensión de su cuerpo.

Pero entonces se derritió contra Mew, gimiendo mientras abría la boca a la exploración de Mew. La calma de Mew fue destrozada por el hambre que brotaba de su interior mientras besaba la boca de Gulf.

Deslizó sus manos por los brazos de Gulf entonces agarró sus caderas, jalándolo más cerca. Acarició la espalda de Gulf.

El duro eje presionándose contra el suyo le decía a Mew que el deseo de Gulf era como el suyo no pudo evitar estremecerse ante las posibilidades no deseaba que su Rajaaka pudiera tener una pesadilla de proporciones épicas.

Gulf gimió, sus manos se tensaban en la camisa de Mew. Mew sintió un bajo gruñido construirse en su pecho. Antes de que él pudiera evitarlo, él lamía el camino hacia el pulso en el cuello de Gulf y hundió sus dientes.

Gulf se arqueó hacia Mew la combinación del duro cuerpo de Gulf contra el suyo y el dulce sabor de su caliente sangre explotando en su lengua creaban una conbinación embriagadora.

Y saber que era su Rajaaka al que sostenía en sus brazos solo aumentó el deseo que recorría sus venas usando su fuerza superior, Mew levantó a Gulf en sus brazos y lo llevó hacia la cama.

Él lo dejó en el colchón, cubriendo el cuerpo de Gulf con el suyo. Mew sacó sus dientes y lamió la marca de la mordida cerrándola antes de levantar la cabeza y mirar los ojos chocolate oscuro de Gulf. Sonrió abrumado al saber que el hombre que sostenía en sus brazos era su Rajaaka...el único que había buscado todos esos años.

-Quiero hacerte el amor, Rajaaka -dijo Mew, suavemente.

Gulf inhaló, sus ojos más abiertos. -M-Mew.

Mew sonrió y acarició de nuevo un lado de la cara de Gulf no podía creer lo suave que se sentía la piel del hombre lo maravilloso que se sentía solo tocándolo no podía esperar para sentir el desnudo cuerpo de Gulf presionado contra el suyo.

La sensación sería como envolverse en cálida seda. -Sé quién eres, Rajaaka. -Mew vio maravillado los profundos ojos cafés de Gulf y sonrió. ¿De qué color serían esos ojos cuando el hombre estuviera a mitad de su orgasmo? -Sigo queriendo hacerte el amor.

-Yo, yo ni siquiera te conozco.

Mew podía ver la confusión en la cara de Gulf, la incertidumbre. Él también podía ver el deseo en él.

Mew llevó su índice a su boca y lo punzó con uno de sus colmillos. -Tú me conoces -dijo Mew mientras frotaba su dedo ensangrentado sobre los labios de Gulf.

-Me conoces como nadie en el mundo un bajo gruñido salió de la garganta de Mew cuando Gulf sacó su lengua y lamió la sangre en sus labios. Él frotó su dedo sobre la lengua de Gulf, entonces lo deslizó al interior de la boca de Gulf.

Mew inhaló profundamente su pene creció dolorosamente duro cuando los labios de Gulf se cerraban alrededor de su dedo y el hombre comenzó a chuparlo. Sentía en su pene, cada chupada de la boca de Gulf en su dedo.

Mew repentinamente supo que su Rajaaka iba a ser un gran problema para él. Él parecía ser muy oral. Mew no tenía duda de que Gulf podía lograr que se corriera solo con chupar su dedo.

Él probablemente se desmayaría de éxtasis si Gulf chupaba su pene. Cuando los ojos cafés de Gulf lo vieron, Mew sabía que estaba perdido.

Él le arrancó la ropa a Gulf necesitaba sentir el cuerpo del hombre entre sus manos necesitaba sentir su cuerpo presionándose contra el de Gulf él lo necesitaba. Los labios de Mew siguieron a sus manos.