Un Año [BajiFuyu]

<Capítulo 8>

29 de agosto

Recibió la llamada de un número desconocido dudaba si contestar sería buena idea ya saben las mamás siempre dicen que no debemos atender números desconocidos, que podría pasar así que contestó pero no fue el primero en hablar sino la persona de la otra línea

—Woah si que haz contestado Chifuyu

Esa voz, la reconoció al instante no estaba para nada equivocado a lo que soltó una pequeña risa

—Si he contestado Mikey, primero más que todo, quién le dió mi número? No recuerdo habérselo dado

—Oh en ese caso me costó un poco conseguirlo, Baji es una persona difícil de insistir pero al fin pude lograrlo —iba riendo por todo lo que hizo para estar hablando con él—

—Al parecer Mikey le ganó a Baji-san sin mucho problema

—Tienes un buen punto Chifuyu, bueno eso te cuento más adelante con más detalle, quería saber si podrías venir a mi casa ya sabes a conversar entre más temas además de que hay alguien que quiere verte, pero ni se te ocurra acercarte que estas muerto —advirtió Mikey—

—No te preocupes por ello Mikey, no sé de quien estarás hablando pero ten en cuenta que no haré nada malo, ahora... Dame la dirección para poder pedirle permiso a mi madre

—Oh claro bien allí va —dijo toda la dirección de donde se encontraba su casa mientras que Chifuyu anota todo— Eso es todo, te veo aquí dentro de unos minutos Chifuyu, bye bye~ —cortó antes de que pudiera hablar—

Dio un suspiro y tan solo le sonrió a la pantalla aunque también le causaba algo de curiosidad del porque debía reunirse, sin darle más vueltas al asunto decidió cambiar de ropa, terminando eso le avisó a su amada madre que iba a visitar a un amigo, ahora se encontraba caminando en la dirección que dijo Mikey

—La curiosidad mató al gato, solo falta que sea un broma de parte suya —dicho eso suspira— Basta, afuera pensamientos negativos

Habla solo en todo el camino que la gente que pasaba a su alrededor le miraba raro aunque eso le valió pico, sin darse cuenta había terminado al frente de una casa la cual mantenía un letrero no importó leerlo así que tocó la puerta en espera de que alguien lo reciba

Para sorpresa suya la persona que lo abrió fue el mismísimo Mikey

—Viniste más rápido de lo que calcule, bienvenido a la casa de los Sano no sanos, digo— Solo pasa —se hizo a un lado para que nuestro Chifuyu pasara—

Aquello lo había confundido un poco aunque rió poco o sino podría causar incomodidad por su risa, ingresó tranquilo a la casa del otro rubio mientras que este cerraba la puerta

—Woah! Tiene mucho espacio y todavía es bonita en toda parte —mira asombrado el lugar teniendo a su alrededor brillos—

—En serio? Me alegra que te guste, sigueme que te voy a presentar a esa persona que te dije —se dirige al comedor abriendo la puerta de este— Ya llegó la persona que querías ver Emma

Chifuyu estaba detrás de Mikey hasta escuchar cierto nombre extranjero por lo que estiró su pequeño cuello a un lado para ver quien era ahora, si antes de que viniera estaba sorprendido lo estaba aún peor no podría imaginarse que Baji también estuviera invitado, este al verlo lo saludo

—Baji-san en una sorpresa verlo aquí, vino de visita y nos encontramos de casualidad? —seguía detrás de Mikey—

—Oh, Chifuyu, bueno no es exactamente que yo venga aquí de casualidad sino que me llamaron para que venga —se encogió de hombros—

De alguna forma algo no cuadra a la perfección pero dejó de lado eso

Ahora si dejaba de estar detrás de Mikey ya que este le indicó que pasara a tomar asiento, observando como una chica de cabellos rubios lo observa detenidamente

—Así que tú eres el nuevo miembro de ToMan, Chifuyu cierto? —dedicó una pequeña sonrisa para el antes mencionado—

—Uh, si señorita son Matsuno Chifuyu y usted es...

—Soy Emma, hermana de Mikey como podrás ver —aquel chico mencionado se sentó a lado de la bella chica, toda una diosa—

—Son hermanos?! Woah! Pensé que Mikey  no tenía hermanos —después de hablar con entusiasmo vuelve a estar modo serio—

—Pfff no te preocupes Chifuyu, tenemos la misma edad

—Si tienen la misma edad —habló serio Baji, parecía enojado pero estaba serio—

Bueno de allí pasaron a conversar de varios temas o algunas anécdotas bonitas de paso que Emma trajo jugo para cada uno

Cada acción que hacían los invitados eran vistos por Emma de manera discreta, según su hermano le informó que ellos dos debía  estar juntos no importa cuanto tiempo pase pero como buena cupida realizaría eso, notaba como Chifuyu tenía pequeño movimientos para acercase más a Baji bueno esto era de manera inconsciente, mientras que este le daba algunas caricias en si cabeza como siempre, estaba decidido ellos si debían estar juntos por lo que decidió no hacer mucho ahora pero en las reuniones debía hacer algo para que estuvieran juntos siquiera un poco tampoco quería entrometerse bastante solo quería que pasarán más tiempo ellos dos

Estaban entre risas y risas pasando las horas hasta la noche , ahora se encontraban jugando con la consola de videojuegos de Mikey ellos cuatro competían pero hubo un silencio causado por el celular sonando y era de Baji

—Me está marcando mi mamá! No ya valí madres que hora es?... Son pasada las 6 de la tarde?! Noooo0oo00o!!! —parecía un niño pequeño preocupado por donde se habría ido su madre en el mercado—

—Deberíamos irnos ahora o sino vamos a recibir palos en recompensa —ambos invitados dejaron la consola de lado y bajaron de la cama—

—Sería mejor que vayan como el Rayo McQueen hasta casa —ríe de lado Mikey— Los acompaño hasta la puerta

—Yo igual quiero acompañar

Ambos hermanos Sano se levantaron acompañando a ellos dos a la salida, agradecían por ser invitados y a penas se sintió el aire correr salieron como bala de aquella casa, temían por su vida ahora

—Mikey, tenías razón, esos dos deben terminar juntos —esbozó una sonrisa en respuesta a lo dicho—

—Verdad que si? No deberíamos meternos mucho, pero puedes ayudar un poco no? Emma —ingresó dentro de casa—

—Claro que puedo, solo un poco pero si seré un poco de ayuda —fue detrás de su hermano cerrando la puerta—