[one shots] /bnha x lectora/

~3Shigaraki~

/shota/       [pov' narrador]

La mayoría del tiempo que llevaba vigilando te no avía encontrado algo sospechoso o fuera de lugar. Todo se miraba bien, una madre y su hija pequeña en un parque, nada fuera de lo común. Algo que era difícil de creer para Shigaraki.

Ya que aquella mujer gracias a su trabajo de barlady en aquel burdel de mala muerte la hacía ver como una prostituta avara.
Algo que estaba muy alejado de la realidad, la mujer solo vivía para su trabajo y su hija.
Por lo que kurogiri le dijo era madre soltera, ex intento de héroe y ahora convertida en un binomio*. El hombre del que estuvo enamorada desde su niñez la abandonó al saber del embarazo y solo le pasaba una pequeña pensión cada mes...

°Patético°

Lleva alrededor de casi dos meses que te estaba vigilando y nada cambio durante ese proceso.

Dejabas a la niña e la escuela.

Te quedabas en casa haciendo tus deberes(aunque la mayoría del tiempo de la tarde dormías).

Te levantas e ibas a traer a la niña de la escuela.

Le preparaba la cena y cuando terminaba tu ibas a tu trabajo.

Regresas a tu casa casi a las cuatro de la mañana y te ibas a dormir.

Un círculo vicioso
Nada fuera de lo común, pero si era así. Porque su maestro All for one le avía pedido llamarte.
Eso no dejo de rondar por su mente, una madre soltera normal no llamaría ni la más mínima atención de su maestro, debía tener algo especial.
Shigaraki no entendía del todo las razones de su maestro, pero no iba desobedecer una orden, así que sin muchas ganas decidió ir a buscarte.

Durante uno de tus turnos él apareció. Llevaba puesta una capucha azul y unos vaqueros desgastados, se acerco a la barra y te observo servir un trago, tenías ojeras por el cansancio, pero aún así les regalaba una sonrisa a los clientes.  Terminaste de servir el trago y diste unos pasos hasta estar enfrente de Tomura, pusiste un brazo en la barra y le regalaste una sonrisa.

- Que te sirvo cariño - él chico se quedó mudo, te miraba fijamente sin decir nada.

- Mi... Mi maestro te necesita - la mujer le miro fijo, manteniendo su sonrisa.

- Mírame afuera en el callejón que está a tres cuadras de aquí en quince minutos, puedes cariño-  Shigaraki asintió aún con los ojos fijos es ti, tenías un aura muy relajante y tranquila algo que a él le gustó.